La Rebelde

Capítulo 24

Cuando llego al castillo mamá y Eady se encuentran en el despacho tan inmersas en su plática que no se han dado cuenta que entre al despacho.

-Mamá, Eady- ambas me miran y corren a abrazarme

-¿Cómo estás?- Eady me pregunta preocupada y escanenandome minuciosamente

-Bien ¿ustedes?-

-Hijo Wynett nos salvó a todas, si no hubiera sido por ello quizá estaría reconociendo nuestros cuerpos- la reyna América nunca exagera en este tipo de cuestiones y me preocupa que sea verdad

-Si, Ahren, debiste verla-

-Iré a hablar con ella ¿En dónde está?- me preocupan los antecedentes de Wynett

-Debe de estar en su habitación, las mandaron a todas a su habitación- Eady me mira tratando de escanear lo que pienso

-Perfecto, ahora regreso- me salgo del despacho y por los pasillos me encuentro que hay más soldados que los que normalmente tenemos vigilando por la situación, debe ser una acción implementada por papá, afuera de los cuartos de las chicas hay más guardias, toco dos veces en la puerta de Wynett

-Adelante- dice y esta sentada en el suelo viendo por la ventana

-Wynett- ella me mira y se levanta para hacer una reverencia, genial, regresamos a eso

-Dígame Prínicpe Ahren ¿En qué puedo ayudarle?-

-¿De nuevo vas a hablarme de esa forma?- 

-Esa es la forma en la que debo de hablarle al príncipe de Ílea-

-No si estás en la selección para ser la esposa del príncipe de Ílea- su mirada cambia totalmente, no esperaba que le dijera algo así, Wynett podrá aparentar mucha fortaleza o que no le gustan las cosas románticas pero se que muy en el fondo es una persona sensible que busca ser amada como todos

-Tiene razón, pero usted lo ha dicho estoy en la selección, no soy la elegida oficial, usted está deambulando entre cada una de nosotras- hasta cierto punto lo siento como si fuera un reproche

-¿Acaso estás molesta porque salgo con las demás seleccionadas?- me acerco a ella y da un paso atrás 

-Claro que no ¿Por qué habría de estarlo?-

-Tus actitudes me dicen otra cosa- me río, no puedo evitarlo, parece una niña caprichosa, Wynett puede disparar e incluso salvar a toda la selección pero es celosa

-¿De qué te ríes Ahren?- se acerca a mi, me da un empujón y antes de que se pueda hacer para atrás la tomo por un brazo y la jalo hasta mi pecho para abrazarla, su mirada me dice que la he sorprendido pero que no le ha desagradado que lo hiciera

-Gracias por salvar a mi mamá, a mi hermana y a tu competencia- río y la acerco más a mi, como si no estuviéramos lo suficientemente cerca, también sube sus brazos para abrazarme y acomoda su cabeza en mi pecho

-No debí salvar a la competencia- me mira con la cara más inocente que en mi vida había visto, no quiero soltarla nunca, quisiera quedarme así el resto de mis días, pero mi deber es otro, no puedo terminar la selección de un momento a otro y casarme con Wynett cuando no he tenido la oportunidad de conocer más a las demás seleccionadas

-A pesar de todo lo hiciste y te voy a estar infinitamente agradecido por eso, pase lo que pase- 

-¿Pase lo que pase? Ahren, yo sé que ésto es la selección pero realmente que selección tras selección se involucran sentimientos, corazones se rompen por ésto y creo que me estoy enamorando de ti de una forma que no creí que fuera posible, me da miedo y no quiero que me rompas el corazón-

-¿No crees que si todos supiéramos que nos van a romper el corazón no nos arriesgaríamos?- la beso en la frente y su mirada se vuelve aún más curiosa

-Claro pero...- se queda callada de repente y agacha su mirada, yo la tomo por el mentón y la hago que me mire de nuevo

-¿Qué sucede?- parece incomoda por lo que me va a contar

-Nunca he tenido novio- desvía la mirada y me hace sonreír 

-No tienes nada de que avergonzarte o temer, no soy un monstruo come chicas- ríe

-Lo sé, pero seguro todas las demás ya han tenido novios e incluso tu debiste tener novias antes y yo soy una novata, no sé cómo comportarme-

-No tienes que actuar de alguna forma en especial, solo debes de ser tu, déjame ver quién eres, quiero conocer a Wynett Phaniu- sus ojos azules que me hipnotizan me miran con curiosidad

-No creo que te agrade la verdadera Wynett Phaniu- 

-¿Por qué? Me gustaría saber cómo es que sabes usar armas y defenderte tan bien, eso no es muy común en señoritas- se separa de nuestro abrazo y empieza a caminar por la habitación

-No soy común y mucho menos como las demás señoritas a las que estás acostumbrada Ahren-

-Eso lo tengo claro Wynett, quiero saber eso, por favor-

-Mi mamá no tenía casta y mi papá es de una de las castas más bajas que puedas imaginar, mis hermanos y yo crecimos como niños de la calle, peleando y robando para poder sobrevivir; mi mamá enfermó y murió porque no pudimos conseguir medicamentos adecuados, mi papá buscó otras oportunidades y pudo obtener trabajos menores al igual que mis hermanos y yo- se encoge de hombros

-Perdóname Wynett, no tenía idea- no sé qué más decirle, siempre me he preguntado por qué no podemos ayudar a todos

-No tienes porque disculparte, no es tu culpa- mira a la nada, siento que tiene miles de pensamientos en su cabeza

-Podríamos ir, no sé, si quieres a la tumba de tu mamá- sonríe sarcásticamente

-Mi mamá no tiene tumba, la enterramos debajo de un árbol en el bosque- creo que debería de dejar de hablar -No tienes que decir que lo sientes, pero esta es una parte de mi, no todo ha sido feliz ni fácil en mi vida, somos muy diferentes y no quiero que te sientas mal o culpable por cada una de mis desgracias-

Tiene razón, no tengo ni la menor idea de lo que han pasado cada una de las chicas seleccionadas y debo de conocerlas mejor, saber quién será mi futura esposa y me estoy enamorando profundamente de Wynett, no sé si sea la opción que debo de tomar y no por sus orígenes pero mi deber es conocerlas a todas para poder eliminarlas y quedarme con ¿Wynett?