EL ELIXIR DEL AMOR

PRIMER ACTO (PARTE I)

(Una granja. Un río en el que algunas lavanderas preparan la colada. En el medio de la escena un gran árbol, sobre el cual reposan Maggie, segadores y segadoras. Lena, separada del resto, se encuentra leyendo.)

Kara quien observa a Lena mientras lee solo atina a sonrojarse -es tan bella y qué adorable, entre más la veo más me gusta, pero sé, que en ese corazón soy incapaz de sembrar afecto, ella es tan hermosa, tan estudiada, no hay nada que ella no sepa, y yo solo soy una idiota, ¿Quién la mente me iluminará? ¿Quién me enseñará a hacerme amar? - piensa la rubia pueblerina.

- ¡Bendito sea este libro!, ¡Es una bizarra aventura! - piensa Lena mientras ríe.

- ¿De qué te ríes? - dice Maggie mientras se acerca a Lena. -Déjanos participar de tu agradable lectura-

-Es la historia de Tristán, Es una historia de amor...- dice Lena mientras levanta la vista y observa a la aldeana.

Maggie hace una seña a los demás aldeanos para que se acerquen, todos se sientan alrededor de la terrateniente y la miran con expectación.

- ¡Léela, léela! - claman los aldeanos.

- voy a acercarme despacio, para así poder verla mejor- piensa Kara oculta tras un roble.

LENA

(leyendo)

"Por la cruel Isolda

el bello Tristán ardía,

y en su alma enamorada

pensaba en poseerla un día.

Cuando se puso a los pies

de un sabio hechicero,

que le dio un vaso

con cierto elixir de amor.

Por lo que la bella Isolda

de él no, no pudo huir jamás."

-ese elixir suena perfecto, pero, ¿Quién sería capaz de hacerlo? O tan siquiera conocer su receta- dice la joven aldeana mirando a Lena con ojos brillantes.

LENA

(continúa leyendo)

"Apenas él bebió un sorbo

del mágico brebaje

y el rebelde corazón de Isolda

se estremeció.

Cambiada en un instante

aquella cruel belleza,

fue de él la amante,

y vivió fiel a Tristán;

y aquel primer sorbo

por siempre veneró."

Todos estaban atentos a la lectura de la rica terrateniente, de repente suenan los tambores, cascos de caballos golpean el polvoriento suelo, se alinean en dos hileras, y por el centro entra un hombre alto y fornido, ataviado con ropajes de seda, quien al ver a la hermosa Lena baja de su caballo, camina fino y galante hacia la dama con un ramo de rosas para tomar su mano y besarla.

-Así como el galante Paris dio la manzana a la más bella, mi adorada campesina, yo te entrego estas flores. pero que él más glorioso, más feliz yo soy, porque en premio de mi regalo me darás tu bello corazón- terminó James para darle una "matadora" sonrisa.

-que modesto es usted caballero- acepta el ramo mientras lo mira arqueando una ceja.

- ¡muy cierto! - suena la voz de Maggie al fondo.