EL ELIXIR DEL AMOR

SEGUNDO ACTO (PARTE V)

Entra a la sombra James y Mon EL y observan atónitos a la rica dama y a la campesina compartiendo un abrazo muy íntimo.

- ¡Alto!... ¡De frente!... ¿Qué veo? ¡Le presento armas a mi rival! – amenazó el militar.

-Así es, James, y conviene dejar las cosas como están. Ella es mi esposa y lo hecho... -

-... hecho está. Quédatela, pues, bribona; peor para ti. El mundo está lleno de mujeres y miles y miles James tendrá. – Olsen está resentido.

-Te las proporcionará este elixir de amor. – dice el doctor.

-Querido doctor; soy feliz gracias a ti- alaba la campesina.

- ¿Gracias a él? – preguntan los presentes.

- Sí, gracias a mí. Sabed que Kara se ha transformado en la mujer más rica del pueblo... puesto que ha muerto su tío... - habla Mon El.

- ¡Muerto mi / su tío! – exclaman Kara y Lena a la vez.

-Ya lo sabíamos...- dice Maggie amargada.

-Yo también lo sabía. Pero lo que no sabían, ni podrían saber, es que este sobrehumano elixir puede en un momento, no sólo remediar el mal de amores, sino que también enriquecer a los pobres. – anuncio el doctor.

- ¡Oh, qué gran licor! – dicen los demás.

- Él corrige todo defecto, todo vicio de la naturaleza. y vuelve bella a la más fea criatura; hace caminar al tullido, aplasta jorobas, alisa bocios, y cura todo tipo de incómodos tumores sí, los deja... como si no hubieran existido... -

- ¡Acá, doctor; ¡a mí, doctor!... ¡Un frasco... dos... tres!... – se amontona la muchedumbre.

DULCAMARA

-Él es un seductor soborno para los guardianes escrupulosos; es un somnífero excelente para viejas y celosos; da coraje a las jovencitas que tiene miedo de dormir solas; un excitante para el amor aún más potente que el café. – anuncia mientras retrocede hacia el carromato que lo espera. - Favorecidos por las estrellas, yo les dejo un gran tesoro, todo reside en él: salud y belleza, alegría, fortuna y oro, florezcan, engorden y enriquézcanse que al amigo Mon El esto les haga por siempre recordar. - y con esto dicho se subió al carromato y partió con rumbo desconocido.

-A él le debo mi esposa. - dice la campesina sonriendo.

- ¡Él me hizo feliz! El efecto de su fármaco nunca podré olvidar. – responde Lena.

-Maldito charlatán, ¡ojalá te despeñes! – dice James rabioso, mientras se aleja.

Kara toma a Lena de la cintura para ceñirla a su cuerpo, se inclina y le da un beso que es correspondido con gusto. Al final, la ingrata Lena se rindió ante los encantos de la despistada campesina, y todo gracias a un elixir, ¡al elixir del doctor Mon El!.

                                                                             FIN

AVISOS PARROQUIALES.

La obra ha terminado, pronto, depende de como esté de trabajos en la facultad subiré otra adaptación, espero les haya gustado el romance de Lena y Kara, y pues ¡ QUE VIVA EL SUPERCORP!