Capítulo 9

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Tal y como JiMin predijo, el Min mayor apareció a la mañana siguiente, con ojeras, parecía algo molesto, ignorando olímpicamente a los dos que vivían con él.

A penas llegó y su pareja con alegría le saludó respondió cortante "¡Mierda sólo déjame en paz, joder, Park.!" por su molestia sin querer había herido al pequeño con esas tan cortantes, frías y groseras palabras además, de haber mirado al menor con aquella furia interna, que si bien no quería desquitarse con él de los días asquerosos que estaba pasando en la agencia, lo hizo involuntariamente aún así.

JiMin bajó su cabeza, encogiéndose de alguna forma a la intimidante y grosera forma de ser que estaba teniendo el Min contra él. De alguna forma, su corazón comenzó a doler cruelmente, ¿era él? ¿era su culpa que estuviese el contrario así de enfadado? ¿qué había de malo en él para que el otro lo mirara así?, jugó con sus dedos sentándose en el sofá. Sentía indudablemente que él era el problema.

Park se limitó a ir a la cocina, en cuanto el otro terminó de ducharse bajó ya cambiado a donde mismo estaba su novio, para buscar algo que comer. El menor no lo miraba, se mantenía alejado mientras le hizo un desayuno simple pero delicioso aún así y se lo dejó allí donde el azabache yacía sentado.

Min ya calmado lo observó, sonrió ante aunque parecía simple, realmente muy elaborado desayuno. Quiso tocar la mano de JiMin, que estaba a su lado haciendo jugo, pero éste en manera de defenderse con miedo, rechazó y alejó su mano, temeroso del otro.
Min YoonGi entonces, cayó en cuenta que la había jodido. Días sin ver al Park y lo único que hizo al verlo fue tratarlo mal, seguramente, el menor pensó que era su culpa, que el estaba molestando, y tenía miedo por esa razón, sin querer, había revivido uno de los tantos traumas que su novio tenía a lo largo de su vida.

— Jiminnie amor mírame. — habló YoonGi, no obtuvo respuesta, el otro sólo tembló. — ¿Bebé...?

Min se acercó a éste, viendo como en el lavabo, su pareja veía como su dedo goteaba sangre, se había cortado sin querer, y lo miraba en trance, viendo ese color carmín de sus peores pesadillas. Simplemente ahora JiMin no podía ver sangre después de tantos años de abuso. El de cabello negro azabache tocó sus hombros delicadamente, como si fuese lo más frágil del mundo probablemente, su chico fresa o estaba molesto o temeroso de él, lo abrazó por la espalda ocultando su rostro en la curvatura del cuello del menor.

— Min YoonGi...no. — habló alejándose. Tembloroso por el tacto del otro, con un poco de temor.

Y en ese momento, YoonGi supo que la había cagado profundamente. JiMin siquiera quería que lo tocase, para que eso sucediera, el menor realmente debía sentirse dolido e incómodo.

— Amor, perdón, no debí gritarte de esa forma, sólo he tenido mucho estrés — habló cansino, sentándose algo triste para terminar de desayunar, su pecho dolía, JiMin nunca lo había rechazado tan mal como ese día. Pero se lo merecía, su mente le gritaba imbécil con letras grandes.

Park frente a él mordió su labio inferior, pocas veces tenían distanciamientos como "pelea de pareja" pero éste momento era una de las tan contadas veces. Veía el arrepentimiento tan sincero en Min, y el menor pensó que realmente no debía ser tan egoísta, porque el mayor si venía cansado, y eso se notaba demasiado, seguro el estrés le carcomía, y JiMin no estaba exactamente en el momento para mimarlo como a él le gustaría, se sintió culpable, YoonGi lo observó con una mirada cansina y llena de culpa también, el peli rosa no pudo resistirse y se acercó para depositar un beso en los labios del Min, quien, lo agarró de su cintura, haciendo que se sentara sobre sus piernas, dándose el lujo que hace tiempo no tenía, saborear aquellos dulces y carnosos labios de su pareja. El menor soltó un pequeño jadeo ahogado por los labios más finos. Al separarse, el de tez pálida sólo apoyó su frente sobre la contraria, dando caricias en la cintura de su amado.

永遠の - ;; Mon bel ange | YoonMin, 2TDonde viven las historias. Descúbrelo ahora