Tengo miedo de enamorarme (En edición)

Capítulo 2

_____Hiro____

El camino a casa fue agradable, el estar acompañado por Koru fue un gran cambio a mi aburrida rutina.

-Tal vez cuando te sientas mejor podríamos dar una vuelta por este parque, quizás comer algo ¿te gustaría -me pregunta cuando podamos junto a uno que está de camino a mi casa.

-Si, no estaría mal salir a dar una vuelta contigo -le sonrió sutilmente y el me devuelve solo que mucho más grande.

Solo espero que sigamos siendo cercanos un tiempo para que eso pueda llegar a pasar, solo deseo que no me decepcione siendo un doble cara como otros. Mis pensamientos pesimistas se detiene al sentir como un brazo rodea mis hombros sacudiéndomelo ligeramente.

-Hey no te enfrasques en ti mismo y hagas miradas tristes, estamos hablando -no parece realmente molesto porque no le preste atención, aunque me hace gracia verlo pedirla- Es descortés señorito dejar hablar sola a la gente cuando, vamos conversa contigo -me regaña en broma.

-Vale, vale no lo vuelvo a hacer lo siento, lo juro -digo soltando una pequeña risa.

-Más te vale cumplir con eso o está sociedad será disuelta -dice en un cómico tono de diplomático.

-Yo no creo haber aceptado ninguna sociedad contigo -le sigo el juego, relajándome un poco.

-Claro que lo hiciste, en el momento en el que comiste de mi comida en el almuerzo, aceptaste permanecer el resto de tus días junto a mi -Bromea y hace gestos con su mano libre, como si explicara algo muy serio.

-No creí que un pedazo de nugget contara como intercambio para un sociedad -levantó una ceja mirándolo, conteniendo las ganas de reí al ver que hace una cara ofendía- ¡quieto un reembolso! -exclamo como cliente caprichoso.

-Primero estoy muy ofendido con tu manera de hablar de mis deliciosos nuggets porque se que los amaste y segundo esos nugget son como la fruta del infierno, solo que en vez de no poderte ir de ahí, no puedes irte de mi lado -se encoge de hombros como si lo que digiera fuera lo más normal.

-Si claro Koru, tus nuggets son mágicos y las vacas vuelan -río con el y le doy un ligero empujo.

-Ya veremos si dices lo mismo cuando no te comparta más -se cruza de brazos y mira otro lado.

-Eres un monstruo -dramatizó y finjo llorar.

-Si lo soy y lastima por ti porque me quedare junto a ti hasta el fin de los días -ríe y sacude mi cabello, entonces nuestras miradas se encuentran.

El contacto visual dura más de lo normal y nos acercamos sutilmente, cuando ya estaban a punto de tocar su nariz con la del otro, notan lo que hacen y se apartan nerviosos

-Creo que deberíamos seguir caminado para llegar rápido -dice nervioso

-Si vamos -desvío la mirada avergonzado por lo que estaba apunto de hacer y con un leve sentimiento de decepción debido a qué pasó nada, demonios que estoy pensando.

Ambos seguimos andando hacia mi casa, en un silencio cómodo, uno al lado del otro.

Cuando al fin llegamos a mi casa, percibí que poco a poco me sentía peor, ya que todo el cuerpo me dolía gracias a la paliza de esa mañana. Estaba tan concentrado en estos pensamiento cuando alguien tocó mi hombro pegue un brinco y mire a Koru, volviendo a respirar al ver su rostro.

-Que linda es tu casa -elogió con una sonrisa, pero desvíe la mirada al recordar que era la primera vez en mucho tiempo que invitaba a alguien a pasar, vergonzoso- ¿Como te sientes?

-Más o menos, pero gracias por acompañarme, ya te puedes ir -le hablo nervioso, sintiendo como la sangre sube a mis mejillas.

-¡¿Que pasa tienes fiebre?!-puso su frente conté la mía para confirmar si lo hacía, pero lo que provocó fue que mi corazón se acelerara golpeando fuerte dentro de mi pecho.

Lo aparte con rapidez no me gusta sentir esto por una persona que casi no conozco y me puede herir o puede cambiar de la noche a la mañana, como lo hicieron los otros, intente alejarme más, pero Koru me estaba sujetando con fuerza de la cintura, que estaba pensando hacerme, de repente sentí rozar mis labios con los suyos, mi corazón latía con más fuerza, ¿Koru me estaba besando? Reaccione intente empujarle, pero solo conseguí que me pegara más a su cuerpo.

-¿Q.Que? ¿Por qué lo hiciste? -me costaba hablar, mis ideas no eran claras.

-No pude evitarlo. ¿Por qué te pones así? Solo fue un pequeño beso -intentó quitarle importancia, mientras me analizaba con sus carmines- ¡no me digas que es tu primer beso! -grito sorprendido y yo asentí cohibido -No puedo creer que yo fui tu primer beso ¡si!- no entiendo por que está tan emocionado de serlo.

-P.Por que estas tan feliz-el cambio su cara de una sonrisa de oreja a oreja, a una expresión sería que me daba escalofríos.

-Es que... Es que...-casi me río al verlo ansioso y mirado a todos lados.

^^^^^Koru^^^^

Maldita sea estaba a punto de confesarme a Hiro, después de haber le besado porque no me pude aguantar, cuando fui salvado por el sonido del timbre. Eso se le llama suerte señores.

-¡Hiro, hijo vengo a recoger algo que se me olvidó llevarme abre la puerta! -grito la que suponía era su madre, iba abrir cuando el me jalo para besarme ¿Quee?-Apuesto que esté Niño torpe se atraso y aún no llega -dijo ella y luego escuché como se alejaba de la puerta.

-Y ahora ¿por qué tu me besarte?-lo mire curioso-

-Porque...-antes de que pudiera responder se desvaneció en mis brazos-

-¡Hiroooooooo!-

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Espero que les haya gustado, hasta el siguiente. Bye