déjame amarte

2.6K 259 23
                                    

Tony no entendía lo que pasaba con Steve.

Era su novio desde hace un año y, si es del todo honesto, estaba completamente aterrorizado cuando se lo pidió.

Afortunadamente, él acepto y Tony no podía estar más feliz. Steve, su amado y hermoso Steve era su novio, después de tanto tiempo de amarlo en silencio y de vivir con el temor de que alguien más descubriera su belleza y se le adelantará, pero, todo había salido bien para él y ahora tenían una estable y hermosa relación.

Sin embargo, y a pesar del tiempo que ya había transcurrido, Steve no quería dar el siguiente paso y llevar su relación al terreno físico. Tony lo respetaba, aceptaba su decisión y trataba de mantener las cosas en el terreno neutral, todo por Steve, por qué le amaba, pero cada día le costaba más trabajo hacerlo.

Y como no, cuando para el, Steve era una representación del pecado en carne, con una carita hermosa, una personalidad encantadora y sumamente atractivo.

Se moría de ganas por tocar su piel, besar cada centímetro de su cuerpo y conocer hasta los lugares más íntimos de su anatomía. Quería amarlo como solo él se merece ser amado, enseñarle todo lo que no sabe, aprender cosas nuevas a su lado, y hacerle tocar el cielo con las manos.

Pero Steve siempre decía que no, a pesar de que su cuerpo daba señales más que obvias de querer lo mismo.

Es por eso que cuando lo estaba besando en su habitación y Steve se apartó sin darle una razón y disculpándose por ello, decidió que necesitaba saber la razón real de por qué Steve lo apartaba cuando las cosas querían pasar al terreno físico, necesitaba una verdadera razón.

-solo dime por qué siempre me apartas cuando quiero hacer algo más, Steve. Y no me digas que es porque no estás preparado, porque te aseguro que he visto las señales y se que tu cuerpo desea lo mismo que el mío. Solo dame una razón válida y te prometo que haré todo lo posible para entenderte y respetarte, pero ya no estoy teniendo la misma resistencia que antes y ciertamente no quiero hacer algo que no deseas que haga- pidió el castaño, suspirando y tomando su lugar al lado del rubio.

-es verdad, Tony... Yo... No estoy preparado- respondió el rubio nerviosamente, jueguetando con sus manos en su regazo y sin atreverse a mirar al castaño.

-no me des más eso, que sabes que no es así. Me doy cuenta de que tu también me deseas a mi- respondió el castaño con frustración, pasándose las manos por la cara. -Steve, dime qué pasa- pidió con tristeza.

-es verdad, Tony... Yo... no estoy preparado para que veas mi cuerpo. Es desagradable- respondió en un murmullo, atreviéndose a decir aquello que le quemaba la garganta y le comprimida el pecho.

-no puedo juzgar algo que no he visto, Steve y ciertamente te he tocado todas las veces en que nos dejamos llevar. Se que eres hermoso, pero tú no me dejas verte- respondió con sinceridad, tomando suavemente su mentón y obligándolo a verle.

-no mientas, Tony. Solo soy huesos y una delgada cubierta de piel. Tu, en cambio, eres perfecto y hermoso. Aún me preguntó por qué sigues conmigo cuando somos tan diferentes- murmuró con tristeza y resignación, transmitiendole sus sentimientos y su gran inseguridad en su mirada.

-no te lo estoy mintiendo, eres hermoso y me muero por verte y tenerte. Y la razón por la que estoy contigo es porque yo amo a Steven Rogers, no a los demás, sin importar si somos diferentes o no- respondió con completa seguridad, ganandose una expresión de sorpresa y asombro del rubio, porque era la primera vez que ponía aquello en palabras.

-¿Tú... Me amas?- preguntó con duda e inseguridad.

-si no te amará no estaría aquí diciéndotelo y ciertamente no trataría de demostrartelo en cada acción. Pensé que había sido claro- respondió con simpleza, para acercarse y poner un casto beso en la boca del rubio, antes de separarse y mirarlo a los ojos -¿Déjame seguir adelante, por favor?- pidió con súplica, a lo que el rubio, después de un momento de vacilación, asintió.

El castaño cerró las distancia entre ellos y unió sus labios con los del rubio, besandolo con pasión y amor, mientras desprendía los botones de su camisa, hasta terminar por completo, para luego dejar que sus besos se movieran a su cuello, mientras sus manos recorrían la tersa piel de su abdomen y pecho, sintiendo la suavidad y calidez de su tersa piel, lo cual le sacó algunos suspiros anhelantes.

-¿Qué pasa Tony?- preguntó apartándose, con la voz agitada, mientras que con sus temblorosas manos trataba de cubrirse.

-que eres más de lo que me imaginé y que me estoy volviendo loco por tenerte- respondió agitado y con la voz dos tonos más abajo, para acomodarse sobre el rubio y reanudar su tarea, dejando que sus besos bajarán del cuello a sus clavículas y pecho, donde se divirtió a su antojo, jugando con los pezones del rubio y sacándole deliciosos sonidos.

Y, mientras le quitaba las prendas al rubio y se desnudaba a sí mismo bajo la atenta mirada de este, se prometió que lo amaría como él se merecía ser amado y que haría todo lo posible por eliminar todas y cada una de las inseguridades de este, y también por qué se amara así mismo de la forma en que Tony lo amaba a él.

Mas StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora