Ardilla

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- Hola es un gusto conocerte -Hablo Mandy- Mi nombre es Miranda, soy la heredera al trono del reino águila -Hizo una reverencia.

La otra chica nunca noto la presencia de quien sería  su nueva compañera de habitación, pues tenía sus auriculares puestos en un volumen muy alto, ni siquiera se había percatado de que la puerta de había abierto, ella simplemente cantaba alegre mientras acomodaba su cama, y guardaba su ropa, la canción que ella cantaba le era conocida a la águila, ya que era la canción de una serie que solía ver.

Miranda al precargarse de los audífonos, se quedó parada en su sitio, esperando a que la otra se diera cuenta que había alguien más en la habitación, ella siguió cantando e incluso comenzó a bailar en un punto, de volteo dando una voltereta mientras danzaba, y se sorprendió a ver qué había alguien más en la habitación, soltó un grito de sorpresa mientras retrocedía y por reflejo le lanzó una prenda que tenía en la mano.

- Am... -Miranda quito la prenda que colgaba de su vestido- No era mi intención asustarte -La miró confundida.

- ¿Quien eres? -Se quito los audífonos asustada a la otra.

- Soy Miranda -Hizo una reverencia- Soy la heredera del reino águila, puedes decirme Mandy, soy tu compañera de cuarto -Le entregó la prenda.

- Oh si, del reino águila, mi madre me dijo eso  -La otra princesa tomó la prenda confundida- Un gusto soy Maribel, del reino ardilla, puedes decirme Bel ¿Cuanto tiempo llevas ahí parada? -Le preguntó.

- Eh... -Se quedó pensando- Tal vez cinco minutos, no quería interrumpirte -Le dijo encogiéndose de hombros- Oh, también me gusta esa caricatura -Apunto al dibujo que estaba en la prenda que le acababa de entregar.

- ¿Enserio? -Le preguntó sonriendo algo incomoda- Está la uso de pijama -Dijo refiriéndose a su prenda- Hace mucho que no la uso para salir -Se encogió de hombros riendo.

- ¿Y por qué no? -Mandy le preguntó confundida- Yo si la usaría para salir -Dejó su maleta sobre su cama.

Mientras la de vestido gris desembocaba sus cosas, la otra le veía curiosa, pues Mandy solo lanzaba sus cosas a diferentes cajones y lugares, cosa que para la organizada de Bel no le gustaba, se le acercó, y le tocó el hombro para llamar su atención.

- ¿Quieres que te ayude a guardar tus cosas Mandy? -Le preguntó con un tono tranquilo.

-Si por favor, siendo sincera hace años que no guardo mis prendas, los sirvientes lo hacen -Rio nerviosa- ¿Podrías enseñarme? -Le preguntó apenada.

La ardilla asintió, y sacó la ropa que estaba la otra había lanzado a los cajones, para luego tener que explicarle pasó a paso como se doblaba la ropa, y como acomodarla en los cajones, teniendo un tipo de prenda en cada cajón. La águila se sentía muy apenada, se sentía como una niña pequeña a la que tenían que decirle como hacer algo tan básico como lo es acomodar su ropa.

- Y dime Bel -Dijo Mandy llamando la atención de la otra- ¿Tu cola es de verdad? -Le volteó ver.

- Si lo es -Le sonrió, y movió su cola- A veces es un poco molesto tenerla, pero, me sirve de sombrilla -Dice para luego reír- ¿Tus alas son reales? -Le cuestionó.

- No -Negó- Se deben ganar -Comentó.

- ¿Y como se ganan? -Preguntó curiosa.

- No lo se -Se limitó a encogerse de hombros.

- ¿No sabes como se ganan los atributos de tu reino? -La otra le preguntó incrédula.

- Mira la hora -Dijo viendo el reloj que estaba en la pared- Ya pronto empezará el baile de bienvenida -Dijo.

Bel se le quedó viendo confundida, no entendía como la heredera al trono olvida cómo conseguir los atributos de su reino, era alto tan mundano de saber, como si olvidara como abotonar una camiseta, o el como respirar, pero no quiso insistir en ese tema, tal vez en su reino no es la gran cosa, así que suspiro, y miró su despertador para verificar lo que decía su compañera.

- Tienes razón, ya deberíamos irnos -Le sonrió amable, para luego dirigirse a la salida de su cuarto.

- ¡Oh! -Exclamó la otra- Te presentaré a los príncipes que acabo de conocer -Paso a su lado y salió antes que la ya confundida Bel.

- Bueno -Respondió viéndola- ¿Los veremos en el baile? ¿O viven en este edificio? -Le cuestionó mientras cerraba la puerta de su cuarto atrás suyo.

- En el cuarto de al lado -Apunto a la puerta de su izquierda, se acercó y tocó la puerta- Hola -Hablo algo fuerte para que sus amigos le escucharan.

- Aquí estamos -Le respondió Clay mientas abría su puerta, para sonreírle a ella y luego mirar a Bel- ¿Como se llama tu amiga? -Miro a Mandy

- Cierto, ella es Maribel mi compañera de cuarto -La presento a sus amigos, para luego ver a su compañera- Bel el es Clayton -Refiriéndose a quien abrió la puerta.

- Un gusto -El estiró su mano hacia Bel- Puedes decirme Clay -Le sonrió amistosamente.

- El gusto es mío -Ella hizo una leve reverencia y estrechó su mano- Puedes decirme Bel -Le devolvió la sonrisa.

- Y el rubio es Albert -Mandy le dijo sonriendo.

- Un placer Maribel -El dio una reverencia y estrechó su mano con la de Bel, ella le sonrió.

- Creo que si no apuramos, llegaremos a tiempo al baile -Clay miró a su reloj- Creí que anunciarían con tiempo antes el comienzo del baile -Miro a su compañero de cuarto, mientras comenzaba a caminar.

- La había -Le contestó el león- Pero, decidieron quitarla para hacer a los alumnos aprender a ser responsables -Se encogió de hombros mientras junto a sus amigas caminaban al lado del dragón.

- Suena lógico-Dijo Bel.

- Pero, algunos de nosotros es nuestro primer día aquí, al igual que el primer baile que no vamos sin nuestros padres, creo que al menos el primer baile si debería tener un aviso -Opinó Mandy.

El resto se quedó pensando, en cierta manera ella tenía razón, después de todo, la escuela fue hecha para la realeza con malos modales, lo cual incluye irresponsabilidad, al igual que impuntualidad en los eventos.

Escuela para la realezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora