PERFECT

3. ¿Acaso es una broma?

[Capítulo 3]

| Daniel Mason |

La llegada al instituto fue algo que me imaginaba, encontrarme exactamente todo igual, justo como el ultimo día que deje de pisarlo. Quizás, esta sea la última vez en verdad que lo haga. A pesar de que me sentía cansado, una parte de mi quería volver estar allí.

Encontrarme con todos me sorprendió, pero ni una mínima expresión de asombro al ver a Kylie, sabía que vendría. Al verla me alegré tanto, tenerla justo al frente era todo lo que quería, para poder contarle absolutamente todo de principio a fin. Como la inmensa alegría que siento al enterarme que mis padres se darían una segunda oportunidad. La atención que me brinda es algo que admiro, siempre me escucha a pesar de las estupideces que digo.

Salimos del salón y nos dirigimos al comedor– ¿Pedirás lo mismo de siempre? –Si–me contesta

–Pues como te decía, fueron las mejores vacaciones de mi vida. Mis padres estaban juntos e incluso decidieron no divorciarse. No sabes la alegría inmensa que tengo.

–Me alegra mucho Dani, ya era hora que se dieran las cosas entre ellos.

Ella siempre con sus lindas palabras

–Si

–Buen provecho

Mientras almuerzo me llega un mensaje de mi hermana Lucia, lo abro y me doy cuenta de que me pide con urgencia que vaya a su escuela, pero ella sabe que estoy en él, igual que ella.

Daniel: Estoy en el instituto, dile a mi papá.

11:00 am

Lucia: No puedo, tienes que venir tú

11:01 am

Observo a Kylie y noto lo incomoda que esta por el silencio que abunda entre los dos. Decido instalar una conversación.

– ¿Y qué hiciste tú, además de estar en tu cuarto encerrada leyendo libros? –Pues salimos en familia y a veces salía de mi cuarto a tomar sol.

–A veces –A veces–Nos reímos juntos de su mala vida social.

– ¿Qué harás hoy?

Llegan los mensajes y rehusó en verlos, pero me gana la curiosidad.

Lucia: Dani te necesito

11:08 am

Daniel: ¿Qué hiciste?

11:08 am

–Eh.

Siento un silencio de parte de ella al no completar su frase y es donde me doy cuenta como se coloca roja en cuestión de segundos. Me fijo en su mirada y esta me conduce a nada más y nada menos que su amor platónico.

–Creí que ya lo habías olvidado Kylie– Pienso en voz alta.

–Puf–Me rio de ella, al no darse cuenta lo roja que está.

–Hubieras visto tu rostro cuando lo viste. –Claro que no

– ¿Qué te comentaba?

–Okey, está bien ¿sí? –Siempre gano

Se enoja y me da mucha risa su expresión

–Estoy seguro que aun sigues soñando con él. – Por cierto ¿Aun sigues escribiendo en tu diario sobre él?