«Dime algo, chico, ¿no estás cansado de intentar llenar ese vacío? ¿O necesitas más?¿No es difícil hacer que siga siendo tan intenso?»
Valentín.
Acompañaba a mi mamá y a mi hermano a una obra en Villa Gesell.
Tenía unos parciales esta semana pero al parecer a mi vieja no le importó obligarme a ir igual.
Aunque las pinturas de "Nix" me encantaban, en este entonces me importaba rendir bien todo a conocerla.
Estacionamos el auto y bajamos.
Obviamente, antes cerramos bien todo.
Mostramos las credenciales y pasamos.
Se escuchaba que una voz dulce hablaba y de vez en cuando largaba leves risitas de nerviosismo.
Termino de escucharse aquella melodiosa voz y la gente empezó a aplaudir.
No sé si era por lo conmovedor del discurso o por qué había sushi y champagne gratis.
Pierdo a mi mamá y hermano de vista pero al instante los encuentro comiendo sushi.
Río y me acerco a ellos.
- Quiero llorar pero antes prefiero algo para bajar esto - comenta mi mamá haciéndonos reír a Manuel y a mi.
Tomamos una copa de champagne juntos para después ver cómo mi mamá iba a saludar a la pintora
¿Podría decirle mini Picasso?
Por qué era como una pequeña versión de el que seguramente después se convierta en algo mejor y tal vez, sobrepase a su pintor ilustre.
- Mamá está de maravilla, el año pasado venció al cancer y hoy vive cada día como si fuera el último, luchamos demasiado para que no se dejará vencer - contó ella sonriendole a mi mamá.
- Que feliz estoy por ustedes Nix, desde que conocí a tu mamá nos hicimos amigas, pero el tiempo nos separó - se lamentó mi mamá.
Manuel me codea y me hace seña para que nos vayamos pero mamá nos llama.
- Vine con mis hijos, no sé si te acordarás de Manu y valen - con mi hermano sonreímos.
- A Manu si lo recuerdo, fue mi primer amor - mi hermano rie y asiente para después abrazarlo - me acuerdo cuando mi... Perdón.
Se secó unas lágrimas rebeldes que salieron sin su permiso para después suspirar.
- Cuando Cristian nos encontró dándonos un beso, ese día mi hermano me reto demasiado pero al final me abrazo aunque a Manu no le prestó la play por un día y medio - concluyó y con la mirada desorientada de Manuel puedo deducir que aquel chico, falleció.
- Tu hermano era lo más cercano a un hermano que en ese entonces no tenía - susurro mi hermano.
Ella lo abraza y acaricia su pelo.
Mi mamá y yo nos vamos, pero los miramos desde lejos.
- Aquella chica perdió tanto, la he visto llorar más veces de la que los viejos a ustedes - comenta mamá con melancolía.
- No sé que abra pasado antes de que naciera pero siento todo lo que pasa y si antes me arrepentía de venir, ahora estoy agradecido de haberlo hecho, los hubiera dejado solo en un momento donde me necesitaban - digo yo y mi mamá me abraza con fuerza.
- Me haces acordar tanto a tu papá - concluye ella.
Veo que Manuel con Nix se acercan.
- Si esperan que termine la exposición, podemos ir a comer juntos - propone Nix y asentimos - No es que no me guste el sushi pero na lo odio, es de gente rica el sushi, yo quiero un asadito o un choripan de fútbol cinco.
Manuel se ríe, al igual que mamá.
Esperamos unas horas mientras recorríamos de paso, Maia compro una pintura.
Era un picaflor que variaba de color y su fondo de un atardecer medio rojizo hacia resaltarlos.
Vemos a Nix venir y la seguimos desde nuestro auto hacia un restaurante.
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Melifluo × wos
Short StoryLas galerías de arte siempre habían sido para aficionados de ella, a excepción de algunos