A world like that ; Ironstrange.

ⅴ; alma

En el ventanal tenía acceso a una visión de la ciudad, autos transitaban, los rayos de sol reflejados en los espejos de los edificios, personas caminaban por las veredas, pocas personas iban y venían, sumidas en el diminuto universo de sus propias mentes.

Un mes transcurrió; viviendo en familia, con las personas más amadas, en ocasiones, percibía rastros de extraños dejavú como en la actualidad, a su vez, lo estaba viviendo, cada día se tornaba más dificultoso evitar envolverse en ese asombroso mundo dónde sólo florecía la alegría, un mundo inexistente.

Una mano fina se posó en su hombro, y unos tacones se retumbaron en los oídos, la mano intrusa abandonó la posición, cuándo se dignó a ver la silueta misteriosa, se encontró con la espía rusa cruzada de brazos, más delgada, apostaría que hasta el busto se le redució sólo un poquito, el carmín reemplazado por un dorado apagado lucía por debajo del mentón, chocando con el lechoso cuello. Cómo la fotografía de años pasados que recordaba haber capturado de unas cámaras de seguridad en África.

—Stark, necesitamos hablar, no salgas con estupideces.

Ese semblante característico de la agente permanecía intacto, intachable, esa esencia inconfundible, la había hechado de menos, sin embargo, con la atmósfera creada era más que suficiente.

Él no es Barton para correr a llenarla de mimos, abrazarla, tomarle las manos y entrelazar los dedos en voluntad de la verdadera amistad, muchísimo menos después de los acuerdos, no obstante, ella se posiciona detrás de Virginia en el corazón del genio, ella lo sabe, y aunque es consciente de posicionarse en un sexto lugar, no luchará por avanzar.

—Arañita, cuanto tiempo, ¿por qué es el gran honor de tu visita? —el sarcasmo fresco, afiló las palabras, siendo testigo de como Alianova rodaba los ojos.

—Melancolía, quién sabe —contestó irónica, penetrándolo con esos hermosos ojos verdosos; recibiendo una honda respiración del playboy con una negación de cabeza.

—¿Cansada de policías y ladrones? —cuestionó en una broma, realista, amarga.

—La rutina es aplastante, la inquietud agobiante, me gustaba estar en la torre, todos... como un equipo, una familia, sentí que lo éramos, una enorme familia desperfecta y a su rara manera feliz. Tal vez, fui quién estuvo indecisa de dónde correr, avanzamos en un bando, terminé en otro pero, Tony, seré transparente contigo.

—Natasha, no deberíamos hablar de este tema —rogó en un murmuro audible para la viuda, la mujer que curvó una ceja, en una advertencia de muerte en la próxima interrupción.

—Jamás imaginé perder a los que amaba, me entrene para matar los sentimientos, llegaron uno tras el otro, atravesando mi corazón como balas, rápidos y precisos. Me permití creer que tenia un hogar, una familia acogedora, el verdadero amor, la contención para darlo y obtenerlo todo, la guerra civil me destrozó, no quería abandonar a ninguno pero, la mayoría ha estado allá, y preferí la multitud, la clandestinidad. Reinicie mi vida desde ese tramo... mírame ahora, hablándole al supuesto rival, cómo se suponía que Steve y tu eran los líderes pero, lo sabíamos, éramos la trinidad que mantenía a los vengadores, un triángulo de ideas, decisiones y fuerza...

A sabiendas que podía perder su orgullosa virilidad, se atrevió a tomar prestada la pausa que realizó Romanoff para hablar.

—La trinidad pensé que éramos, Steve, Thor y yo —fingió sorpresa, continuando inmediatamente—. Tu eras quién tenía los pantalones puestos en la casa, este lugar es el hogar de todos —giró el dedo índice en círculos—, nosotros, yo también pensé, soñé que teníamos una extravagante familia, yo ponía el dinero, tu hacías valer las órdenes, y Rogers creaba las reglas, Clint, Thor, Peter eran los niños inquietos y...

—desastrosos —completaron al unísolo, sonriéndose al darse cuenta de la casualidad.

—Wanda y Visión los adolescentes enamorados a quiénes debíamos cuidar, Rhodes, Sam el dúo de chocolate que vivían compitiendo por quién era más genial, y mi querido Brucie, el ángel inocente, puro e ejemplar. Eran, son, lo más preciado que he tenido, y yo no puedo perdonarlo, fusione cada recuerdo pero, es un bloqueo que no logro esquivar, no a él, a ustedes los recibiré, los tengo presente cada día... Los primeros meses, los esperé, me inventé excusas, nunca regresaron, y logré salir, amplíe mis vínculos.

—Tony... tengo un mal presentimiento, es esa la razón de estar haciendo mención de esto, nada regresará, no podemos regresar en el tiempo fingiendo que nada sucedió, son lo único que tengo, cerca o lejos, no me des esperanzas, y déjame seguir mi marcha, desearía que solo sea una pesadilla agria.

Una lágrima traicionera escapó de los orbes oscuros de Stark, con un mal sabor de boca inexplicable, comprendido, es lo único que atravesó su pensamiento.