Un Pedacito De Corazón.

Felicidad

*Felicidad*

Un amanecer.
Una puesta de sol.
Un café en la mañana.
Una mirada de mamá.
Una sonrisa de papá.
Una broma con un hermano.
Un abrazo de un pequeño.
Un mensaje de un amigo querido.
Una clase de la carrera que amo.
Y si se tiene suerte, el corazón de la persona que amamos.
El canto de un pajarillo.
El salto de tu mascota.
La comida de un domingo.
La cerveza con un ser querido.
Las frasadas calientes después de un largo día.
Y si tenemos suerte que eso se repita todos lo días.

Eso, eso es lo que importa.

Pueden haber mil problemas, podemos enojarnos, pelear, fracasar, caernos y sentir que no tenemos para donde correr. Podemos sentirnos tristes. Podemos sentir que no sirve luchar por algo inalcanzable como la felicidad.

Y ese es el mayor error.

Ahí es donde demostramos lo tontos que podemos ser los seres humanos.

La felicidad está en todas las pequeñas cosas, somos nosotros los que por cosas normales y pasajeras nos negamos a ver, nos cegamos y no apreciamos las cosas hermosas que nos rodean.

Tenemos a la felicidad entre las manos, la respiramos todos los días. Es cuestión de verla, de poder apretarla fuerte cuando pasan cosas malas. Aferrarnos a lo que si tenemos, a lo que no nos falta.

A veces por concentrarnos en cosas banales que nos "faltan" dejamos ir a lo que siempre está ahí. Algunos le llaman ambición.

Yo le llamo idiotez.

Pensamos que las cosas siempre estarán ahí. Pero no.

Luchamos por alcanzar y acumular cosas que no nos aportan. Que no nos construyen.

No deberíamos confiar en que todo estará ahí por siempre.

Un día ya no amaneceremos.
Un día veremos un atardecer que será el último.
Un día el café no estará.
Un día mamá ya no podrá mirarnos.
Y papá ya no podrá sonreir.
Un día no verás más a tus hermanos.
Un día el pequeño ya no será pequeño.
Un día tal vez el amigo ya no lo sea.
Un día las clases serán trabajo.
Un día ese corazón ya no será tuyo.
Un día los pájaros ya no cantarán y tu mascota ya no saltará.
Un día ya no habrá más cerveza. Y si la hay tal vez no haya ser querido para compartirla.
Las frasadas ya no estarán calientes.
Y los deseos no siempre se cumplen.
Y el siempre no existe.

Agarremos fuerte lo que si tenemos. Aprendamos a ver lo que si vale la pena. Abracemos fuerte lo que amamos. A los que amamos.

Un día las cosas que más nos llenan ya no existirán. Y no tienen reemplazo.

La felicidad está ahí. Agarrenla y no vuelvan a flaquear.

La vida es esta, es dura, no es perfecta. Pero es hermosa.

La muerte es inevitable, las cosas acaban. Todo se termina. Y sólo vamos a llevarnos pequeños detalles. Tesoros intangibles.

Los lingotes de oro no valen de nada en el otro lado. Pero esos tesoros nos hacen brillar arriba.