Ella

14 5 3
                                    

Realmente no creo que me haya podido dar cuenta antes, creo que nadie se da cuenta de nada antes de ver todo derrumbarse; eso es justo lo que me pasa a mi.

Nunca disfrute de demasiadas amigas, aunque de pequeña era muy social mi grupo de amistades era limitado, siempre lo fue. cuando entre a la secundaria como suele pasar con muchos adolescentes mi mundo dio giros inesperados; mi primer novio, mi primer beso, mis primeros confidentes, mis primeras discusiones con mis padres todos por primera vez y luego todo eso se volvió tan rutinario y normal, dejó de ser mi mundo para primerizos y empezó a ser un campo de guerra. Si, un campo de guerra llamado secundaria.

Tuve algunos meses malos y otros realmente buenos, pero siempre estuve acompañada de mis más fieles amigos, nunca pensé que necesitaría más, pero supongo que la vida te enseña de la peor manera a no conformarte. En mi salón como siempre había una chica realmente odiosa ¿o la odiosa era yo? Realmente hoy pese a todo no he podido darme cuenta de eso; ella tenía muchos "amigos" que realmente hablaban mal de ella a sus espaldas, un novio bastante patético y una hermana que se notaba lo mucho que no la quería ¿o si? ya no estoy segura de eso como hace unas semanas. Es increíble lo mucho que puede cambiar la vida de alguien por un corto periodo de tiempo, aunque para ser sincera creo que lo mío empezó hace bastante mucho.

Me enamoré, de verdad. no fue solo la típica ilusión de adolescencia (y lo sé uso mucho la palabra típico porque sé que el comportamiento adolescente cumple con muchos patrones y sé que pensaran que yo solo seguía todos, quizá así sea no lo se) pero siguiendo con la historia, me enamoré en muy poco tiempo y fue la peor decepción que tuve en mi vida, con ese chico se fue mi primer pilar, aunque aún tenía otros que me sostenían ya empezaba a tambalearme. Pase muchos meses tratando de superar esa decepción con apoyo de mis amigos, pero nunca lo logre, sigo sin lograrlo.

Quitando eso de lado todo estaba bien mi relación con mi padre se había deteriorado con el tiempo, pero no es algo que me preocupa o preocupaba. No tenia mucha relación con mis otros familiar y mi hermano es aun bastante pequeño como para confiarle mis problemas.

Cada que me pasaba algo buscaba el consejo de mis amigas, una de ellas siempre estuvo ahí para mí, siempre me escuchó y me decía todo lo que necesitaba para levantarme cada que me caía;  pero de pronto ella empezó a alejarse de mi, en un principio yo no quería preocuparme sabía que tenía derecho a tener otras amistades y que no podía acaparar su tiempo siempre pero ella se alejo a tan punto de ya no hablarme ignorarme y soltar pequeños comentarios sarcásticos que me lastimaban cada vez más.

Pasó de ser mi más fiel confidente a una chica que no hacía más que dañarme, alguien con la que no podía cruzar palabra y necesitaba mantenerme lejos.

Pase mucho tiempo tratando de superar el dolor que me había causado que ella se alejara así de mí. Así que busque a otras personas, amistades que había dejado olvidadas por prestarle atención solamente a ella; me di cuenta que había gente maravillosa a  mi alrededor. El problema no era yo, no era ella simplemente nuestra amistad se había caducado; por un momento pensé que era culpable, que todo fue  culpa de mi personalidad pero me di cuenta que no era así,  el tiempo se había acabado para nosotras nuestra amistad había llegado a su fin.

No puedo culparla por alejarse, no puedo culparme por dejarla ir. Solo queda el hecho de sobrevivir al dolor de ser reemplazada y aprender a vivir con ello.

Relatos Para Una Noche de InsomnioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora