Los invictos: La Espada Mágica

Capítulo 26

   Zanquiy quedó con los ojos muy abiertos y con la boca mínimamente abierta pero sin palabras que decir. Mientras tanto Oncar se levantó de la roca en la que estaba sentado, algo entusiasmado y dijo:

   -Bien, pues luchemos-

   Su sonrisa con ansia de batalla se extendía por su mejilla izquierda, lo que más miedo daba de esa situación es que Bura tenía la misma sonrisa. Oncar se preparó a la vez que Bura mientras ambos se miraban a los ojos pero segundos antes de que empezasen, Molen los interrumpió gritando con su mano izquierda extendida:

   -¡Wakalanna!-

   Su mano se cubrió de fuego y poco después se formó una bola de fuego no muy grande aunque más tarde de esa bola iban apareciendo más y más, todas con el mismo tamaño, segundos después se empezaron a disparar. Más bolas de fuego se formaban en menos de un segundo y en ese mismo instante se disparaban. Poco antes de que las primeras bolas lo alcanzasen, Bura dio un salto enorme, pero Zanquiy ya se lo esperaba, lo apuntó con su arco mientras decía:

   -Quizáa la magia no sea mi fuerte, pero también la puedo usar, ¡FLECHA DE AIRE!-

   Una onda de aire se generó alrededor de Zanquiy poco antes de que soltase la flecha, disparó la flecha, la cual hizo una gran onda que se iba extendiendo según iba avanzando, la flecha no era visible debido a su velocidad, pero Bura fue lo suficientemente rápido como para moverse unos centímetros y que la flecha no le diese por una nimidad de distancia, aunque eso lo preocupó, ya que era una flecha muy rápida, y tenía que utilizar gran parte de su fuerza para poder esquivarla. Pero en ese instante que utilizó para mover su cabeza y esquivar la flecha, Molen lo aprovechó para apuntarle y lanzarle más de sus bolas de fuego, Bura se veía acorralado así que dijo:

   -Gender bons-

   De las manos de Bura empezó a salir hielo, decidió congelar todas las bolas que se le acercarán y a su vez formar un puente desde el suelo hasta la zona donde el estaba en el aire, Molen tuvo que dar un salto hacia atrás para no ser congelado, Bura se deslizó por su puente casero y cuando aterrizó, Luinie no tardó en acercársele por la espalda para atacarlo con su espada, pero este se dio cuenta, se dio la vuelta rápidamente y cuando vio la hoja de la espada acercarse sin ningún temor la cogió con su mano desnudar incluso no se cortó, apretó el puño y movió la muñeca, rompiendo así el arma. Sonrió y dijo insinuandose a Luinie:

   -Eres bastante guapa, ¿Qué tal si acabamos con esto y nos vamos a cazar algún animalito y nos lo cenamos bajo la luz de la luna? Hmmm... Parece un buen plan, ¿Quieres que lo hagamos?-

   Luinie le contestó algo vacilante y entrecortada.

   -¿E-En serio? E-Esto... No sé que decir, me siento algo nerviosa y halagada-

   Bura sonrió confiado y dijo con un tono relajado:

   -¿Entonces te parece bien?

   Luinie puso una cara sería y con un unitono rudo dijo:

   -No-

   Levantó su pierna e intentó darle una patada en la cara, pero Bura dio un salto hacia atrás y sin haber borrado la sonrisa de su rostro le contestó:

   -Bueno... ¿Qué más da?