Saliendo de clases fui a la casa de Gab, hace mucho que no la veía.
Toque su puerta y su mamá me abrió.
-Hola, Charlie, pasa.
-Gracias señora.
Espere en la sala, hasta que bajo Gab.
-Hey hola.- me dijo muy entusiasmada
-Hola ¿Quieres salir un rato?
Fuimos al parque que estaba por su casa, donde le conté que ya tenía novio.
-Enserio, Charlie que bien!
-Si, es... es Alex.
Se quedó impresionada.
-Guau... Pues espero y sepas como enamorarlo por que él es un bombón.
No podía dejar de reír.
-Okey.. okey se que lo es.
-Bueno... oye tengo hambre ¿Vamos a comer?
Comimos en su casa, pedimos una Pizza, las cuales me encantan.
Me llegó un mensaje.
-¿Listo para la cita?- Era Alex y yo aún no estaba listo.
-Amm... si aja ¿Por?
-Se te olvidó ¿verdad?
-No, no es eso, bueno si un poco jeje... pero voy a mí casa a cambiarme rápido ¿Ok?
-Mm... bueno pasaré por ti como a las 7:30.
-Okey, oye..
-¿Qué?- Se veía que estaba enojado
-No te enojes, te amo.
-Contigo no me puedo enojar más de 10 segundos, te amo más.
Me despedí de Gab y fui a mi casa a cambiarme.
A las 7:30 él ya había llegado.
Mí mamá le abrió, ya que solo estabamos ella y yo.
Esperé a que entrara y me hablara mí mamá para bajar y así fue.
-Charlie, aquí está Alex.
-Bajo en seguida.
Después de lo que pasó con mí mamá, tuve la oportunidad de hablar bien con ella, ella me aceptó como soy y yo lo deje en el pasado, solo le conté que ya tenía novio.
Bajé las escaleras, me puse unos jeans café claro y un sueter de Hipster.
-Hola.
Él no dejaba de verme y mí mamá tampoco, no sabía por que, no iba muy bien vestido.
Pero él,... él venía perfecto, tenía su cabello alborotado pero bonito y traía una playera gris de manga larga, lo que le hacía resaltar sus hermosos ojos.
-Hola.- Al fin me contestó.
-Bueno, mamá regreso al rato ¿Ok?
-Si, claro, solo espera.
Fue por una cámara y nos tomó una foto.
-¡Mamá!- Esto era vergonzoso.
-Ya, ya lo siento.
Me despedí de ella y nos fuimos de mí casa.
Yo creí que me llevaría a cenar a un restaurant o algo por el estilo pero no, estabamos en su casa, había una mesa en el centro, donde habían dos platos y unas velas muy bonitas.
-Se que no es mucho pero..- Para mí era perfecto, amaba más esto que ir a cualquier otra parte.
-¿Estas de broma? Es... ¡Perfecto!
Nos sentamos a comer primero era ensalada, después comimos fideos y al final una copa de vino acompañado con pan en queso.
Al terminar de comer, levantó los platos y se fue a la cocina a lavarlos.
-Y... ¿tus padres?
-No están, fueron a una fiesta.
-Oh... bueno.
Me pare del comedor y empecé a inspeccionar la casa.
Era acojedora y bonita.
-Ahora ¿Qué quieres hacer?- me preguntó.
-Ammm... no sé.
-Conozcamonos más.
Me parecía muy buena idea.
-Okey, empieza- me dijo.
-Amm.. bueno, he tenido muchos problemas en mí vida, bueno, mí pasado, primero lo de ser gay, no es fácil cuando tu familia no lo sabe y esta quejandose de eso, todo el tiempo, después tengo... tengo un...- No sabía si contarle.
-Vamos dilo.
Tengo mucho miedo de hacerlo pero creo que es lo mejor, así que le diré, solo no sabía como empezar.