POR SIEMPRE TUYO│KOOKV。o○.｡o○.

V

Una vez dijiste que yo jugaba contigo. Luego de esa fiesta de HoSeok sentí que tú eras el que jugaba conmigo. Lo comprobé a los días después, cuando te encontré en la cafetería a la que íbamos siempre. Estabas con él. Tomados de la mano. Mirándose con ternura. Dedicándose palabras de amor.

Te vi y tú no me miraste. Yo te miraba a la espera de que me entregaran el café que había pedido y soporté de manera estoica los deseos de ir a desfigurar el rostro de Min YoonGi. Te quería gritar. Quería llorar ante ti como nunca lo había hecho antes. Te amo, te hubiera dicho frente a todos si tan sólo me hubieras mirado. Pero no lo hiciste y yo sólo recibí el café y me marché de ahí.

Me había perdido a mí mismo, lo que era más difícil que haberte perdido a ti porque por lo menos sabía por qué te había perdido, pero no sabía por qué me había perdido a mí mismo. No te niego que quise volver a encontrarme, que quise recuperar el Jeon JungKook que era antes. De tal modo, volví a las fiestas, volví a dejar que otros me coquetearan, pero nada me hacía volver. Todo me aburría, todos me parecían despreciables y sin brillo. Nadie tenía tu intensa mirada, tu hermosa sonrisa, tu delicado andar, tus perfectas piernas. Nadie hacía que mi corazón latiera de la manera en que lo hacía cuando me susurrabas al oído que me amabas.

¿Hasta cuándo me harías esperarte? ¿Cuándo vendrías a mí? Me estaba perdiendo y sólo tú podías salvarme. Eras tú, tú, tú, siempre tú. Por eso me dejé hacer como un idiota la vez que nos volvimos a encontrar en otra fiesta. Nuevamente te estabas dando un tiempo con YoonGi y yo estaba ahí para hacer que lo olvidaras. Yo estaba dispuesto a estar esa noche para ti y casi lo logro. Estábamos bailando, ¿te acuerdas? Te tenía apegado a mi cadera mientras me perdía en tu mirada lujuriosa, entonces sentí que alguien me apartaba de ti de un empujón y sin tiempo para ver quién había sido, sentí el golpe en mi mejilla. Me iba a lanzar sobre tu, cómo llamarlo en ese momento, ¿ex novio?, pero te interpusiste entre ambos. Le dijiste a YoonGi que se calmara, que no armara un escándalo. Él te gritó. Yo también te gritaba en el pasado. HoSeok me obligó a salir del lugar y me pidió que no me entrometiera entre ustedes, que lo mejor era que me marchara.

Al otro día volví a ese lugar y no fue necesario que nadie me dijera que ustedes habían vuelto. Lo veía todo claro desde mi posición junto a la barra. Bailabas con él, dejabas que te besara y lo abrazabas de vez en cuando. Sólo una vez me miraste, pero fue como si no lo hubieras hecho. También jugaste conmigo, ¿te das cuenta?