Lo que llevo dentro

Cap. 7 #Especial de cumpleaños

Hola a todos! Primero les respondo la inquietud no planteada ¿especial de cumpleaños? Pues... Ayer fue mi cumpleaños! Quería actualizar ayer pero me detuvo mi cumple. Actualizare en casi todas mis historias y publicare nuevas. Empiezo con esta, avisando que seguiré en la fandom. Ya no me importa tanto la cantidad de visitas relacionados a los votos, me quedo y me aguantan carambas!  Empecemos con...

“Sentimientos guardados”

Fueron a la habitación de Poppy y Ramón explicó a todas absolutamente todo, desde el accidente hasta el día anterior a esa noche. Poppy lloró de alegría (claro el milagro de que no se matara) abrazándolo como si su vida dependiera de ello, pero las demás no se veían muy “animadas” al momento por así decirlo. Satín y Seda veían la expresión de Ramón en el abrazo, era correspondido por supuesto era evidente que la extrañaba mucho, pero claramente  estaba lastimado por lo que vio; Dj no creía que Poppy enserio recibiera así con los brazos abiertos a su “difunto” pero se mordió la lengua para no parecer indiferente.

El día siguiente, era justo día libre de Poppy. Fue algo avanzada la mañana al cuarto de Ramón (que estaba al lado) aun no creía que enserio estuviera ahí, muy alegre dejó a la bebé frente a su rostro. Esta veía a su padre con curiosidad, gateó hasta el cabello y haló algunas de aquellas hebras violetas con suavidad detallando todo, realmente le llamaba la atención ese color. Ramón abrió lentamente sus ojos aún dormido y medio encontrándose esos ojos rosa tirando a fucsia, pertenecientes a su hija.

Ma...má –Rose señala a Ramón mirando a su madre-

Noo… yo soy mamá, él es papá. Ramón, ella es Rose. Tu hija, de la que te hable anoche

(Sentándose) oh, hola… ¿mi amor? ¿puedo decirle así?

Sí… puedes decirle como quieras. (Contenta)

Eres muy hermosa, heredaste mi encanto y atracción. –se la para encima para jugar con ella- me gustaría darte algo, pero, no tengo nada aún. –Hace como si la “mordiera” sonriéndole en juego- ñan, ñan, ñan, ñan… ¡Voy a comerte! (juguetón)

¡Aahh! –Grita la bebé muerta de risa-

(Ríe) Si tienes qué darle, tienes tu tiempo. Quería saber si… bueno, te interesa caminar con nosotras si no tienes qué hacer.

¿Por qué no? –deja de mimar a la bebé, deja un besito en su frente y se la da a Poppy. Rose reía muy fuerte, seguro era el llamado de la sangre. Rose no es de mucha confianza a cualquiera- paso por ti a tu cuarto.

Okey. (Sonriente)

Ramón se sentía esperanzado, tal vez podría recuperar a su familia después de todo. Pero su sonrisa se borró una media hora más tarde cuando fue a buscarla a su cuarto, ahí estaba el rompefiestas llamándole la atención, o bueno, discutiéndole algo. En completo silencio, miró por la hendija de la puerta que como cosas de la vida o simple descuido estaba entreabierta