Capítulo 39: No te vayas de mi lado

236 30 4
                                    

– Esto nunca pasó! – dije furioso poniéndome mi ropa.

– Crees que no lo sé!? Tú fuiste el idiota que me lo hizo – respondió igual o más molesto cambiándose el por su lado.

– Si te atreves a decirle una sola palabra sobre esto a Ren-

– Crees que quiero que me odie? – me interrumpió – Es obvio que no se lo diré. Es tal y como dijiste – se giró viéndome de frente – Esto nunca pasó! – tomó su chaqueta y salió a paso rápido de ahí.

– Idiota! – grité lanzando mi chaqueta contra la cama, me quedé viéndola un largo rato hasta que decidí cogerla u salir de ahí también.

De alguna manera terminé en la cafetería, llame a JR para que venga, no podía ni caminar bien en estas condiciones.

– No creí que conocieras este lugar – dijo mi amigo sentandose frente a mi con una sonrisa – Apestas a alcohol. Con razón Minerva me llamo preguntando por ti.

– Ella te llamó? Acaso no regresaste?

– Me quedé con unos amigos por ahí.

– Tu no tienes amigos aquí.

– Ahora si. Por qué razón fuiste a beber?

– Nada – oculte mi rostro entre mis brazos, recostado sobre la mesa.

– Para ser nada, bebiste bastante. Recuerdas algo de lo que hiciste.

En el momento que dijo eso, fue como si activara algo en mi cabeza haciendo un click, recordando momentos breves de lo que pasó.

Totalmente vergonzoso.

– No – mentí

– Vamos con Minerva, debes darte un buen baño y por como te veo, también descansar. – se levantó para ayudarme a pararme, pasó mi brazo por sobre sus hombros, dejó un poco de dinero sobre la mesa por mi pedido y comenzamos a caminar.

*Jason

Me deje caer al suelo una vez cerré la puerta, el dolor en mi cadera y piernas era insoportable luego de que los efectos del alcohol se fueran de mi cuerpo, me arrastre hasta mi cama, apoyándome en ella para levantarme.

– Dios. Si que ese tonto fue una bestia anoche – susurré para mí sosteniendo mi cadera.

Miré la cama de MinKi, estaba tendida y no había rastro de él por ningún lado.

– Tal vez salió temprano – volví a susurrar acercándome a su cama, ahora más dolido por él que por el dolor de mi cuerpo.

Aunque trataba de mentirme, en el fondo sabía que no había llegado a dormir, otra vez.

– Jason, despierta – dijeron en mi oído.

– Cállate y déjame dormir – di vuelta cubriéndome aún más con las cobijas.

El dolor de cabeza aún no se iba y estaba por matarme. Nunca más vuelvo a tomar.

– Estás en mi cama. Si quieres dormir vete a la tuya. – reclamó – Sabes qué? Quédate ahí, apestas.

Abrí los ojos con el ceño fruncido y me senté para verlo, estaba en la puerta a punto de salir otra vez

– A donde mierda te vas ahora?

– Que te importa.

– Ah! Es obvio, ahora que tú idiota está aquí, vas como su buena puta detrás de él. – alcance a decir antes de que se vaya logrando detenerlo.

Bully (JRen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora