Bully (JRen)

Capítulo 24: Noticia

Llegamos a mi casa en completo silencio, por alguna razón Minhyun y Aron permanecieron así durante todo el trayecto, era de alguna manera incómodo.

– Gracias por traerme Min – dije al bajar del auto y girar a verlo – See you later Aron.

– Good Night Ren.

Me despedí una vez más con la mano y gire hacia la entrada de la casa, saque las llaves y abrí la puerta. Ni bien cruce la puerta un mensaje me llegó.

Desconocido:

¿Llegaste bien a casa?

¿Quién es?

Desconocido:

Nadie importante.

¿Entonces, llegaste bien?

...

No sé si sea buena idea responder a "nadie importante"

Buenas noches.

Apague el teléfono pensando en lo extraño que resultaba aquello, de hecho todo en esa noche me resultaba extraño.

Dejé las llaves sobre la mesa y caminé a la sala quitándome la corbata, ya me apretaba el cuello.

Me deje caer sobre el sofá y prendí la televisión, fui cambiando de canal hasta que una noticia me detuvo.

Hace algunas horas, los cuerpos encontrados en el límite de Seúl con Pyeongchang han sido identificados como el señor y la señora Choi, que hace más de 3 años han estado reportados como desaparecidos. Causa de muerte; aún desconocida. La sociedad entera ahora está-

Mi cerebro se desconectó dejando de escuchar las palabras del conductor de televisión, viendo únicamente las fotos sonrientes de mis padres en pantalla, sin notarlo las lágrimas caían sobre mis mejillas, mi respiración se cortó y algo dentro de mí se rompió.

Forcé a mi cerebro a escuchar nuevamente, debía saber más, debía saber dónde estaban y darles al menos un funeral digno de ellos.

- más aún. Sin embargo, no hay rastro de su hijo, por lo que creemos que aún es rehén de la milicia Norcoreana. El funeral de los señores Choi, será realizado en la capital luego de que el equipo forence determine las causas de muerte.

En otras noticias; en la reunión que se dió acabo la noche de hoy en la Mansión Kim fue revelado el compromiso del heredero de la familia con una de sus socias comerciales más grandes de la industria-

Apagué la televisión y me levanté con calma. Miré la mesa que adornaba el centro de la sala, me agache y desplacé la parte de arriba viendo las fotos que estaban escondidas ahí, fotos de mis padres, de mi hermano, mías. Fotos en familia, sus sonrisas, nuestras sonrisas, los momentos que compartimos juntos, todo.

Me había convencido que los odiaba, pero solo los extrañaba. Los extranaba mucho, y saber que ahora no podré compartir más momentos junto a ellos, jamás. Solo me hace sentir como la peor persona de este mundo, los odie sin saber por lo que ellos pasaban, sin saber lo que sufrían, sin saber, que no los iba a volver a ver.