Capítulo 44: De regreso a Seúl.

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Regresé a casa de Minerva poco después de lo ocurrido con Ren, no tenía idea qué hacer, acababa de literalmente terminar todo aquello que creí que teníamos, me sentía como un idiota, y lo era, por dios lo sabía, desde el primer momento lo sabía, me había gustado desde el instante que lo vi, nunca lo acepte, pero ahora es más que obvio. Me había dolido la forma en la que habíamos terminado, desee nunca haber mencionado a sus padres, ni a mí maldita prometida, la odiaba. Por robarme todo lo futuro junto a la persona que amaba.

Había perdido a la persona que amaba de la manera más idiota que se pudiera imaginar. Perderla por un matrimonio arreglado no es algo que algunos en quisiera experimentar en su vida. No podía arreglar las cosas, me odiaba por eso, no poder decirle abiertamente mis sentimientos, tenía miedo y lo admitía, a pesar de que sabía que me quería, tenía miedo, un  miedo absurdo la verdad.

Mi padre me daba miedo, decepcionar a mi hermano me daba miedo, aparecer frente al mundo, me daba miedo. Pero lo que más miedo miedos me daba, era perder a quien amaba, y lo hice, lo perdí, y tal vez para siempre.

– Donde estabas? – preguntó BaekHo al verme entrar a la habitación

– Cerca. Puedes llamar a SungJae?

– Ocurrió algo? – se apresuró a preguntar

– No. Solo quiero volver a casa.

Me di vuelta caminando hacia el baño, dando por terminada esa conversación.

Regresé a la habitación media hora después, BaekHo ya se encontraba dormido en la cama, por lo que tomé unas cobijas y recosté sobre el sofá.

Miraba al techo dejándome llevar por mis pensamientos, tratando de encontrar otra manera de no perder a Ren.

"– Si el destino lo permite –"

Sí claro, destino.

Giré, ahora observando la ventana. Estaba comenzando a llover, esa noche haría frío.

Mi celular comenzó a sonar sacándome de mi sueño, lo tome de mala gana y sin intentar despertar, contesté.

– Qué!

– JR, soy yo.

– Oh. Hola Vernon. A qué hora llegas?

– Ya estoy aquí. BaekHo trajo tus maletas hace 5 minutos, solo faltas tú.

– De acuerdo. Me despido y voy de inmediato.

Corté la llamada, me levanté pesadamente, lave mi rostro y luego de despedirme y agradecer a Minerva, fui directamente al lugar donde se encontraba el Jet.

Eran las 4 de las tarde en Corea por lo que llegaría a Seúl a las 10 de la noche.

Realmente me hubiera gustado pasar más tiempo con Ren, pero por como terminaron las cosas, no tengo porqué seguir aquí.

*Ren

Aliste mis cosas de forma inmediata, sin decirle nada a nadie, reserve un vuelo que salía a las 3, eran 12 horas de vuelo, así que mientras más pronto saliera, más pronto llegaría.

Salí rápidamente sin detenerme, apesar de que algunos comenzaron a gritarme que a donde iba.

No tenía tiempo para responder, no tenía tiempo para nada en realidad. Debía llegar a Seúl de una u otra forma.

"– Dice ser tú –"

MinSeok. Era el único que sabía sobre la empresa de papá, y si deciden hacer pruebas de sangre, es obvio que saldrá positivo. Jamás se arriesgarían a dejar a un desconocido a cargo de la empresa.

Tomé un taxi directo al aeropuerto, eran las 2:45, debía llegar ahora o podría perder mi vuelo.

*JR

Tal y como dije, llegamos a Seúl a las 10:30. Dormí, o bueno, fingí dormir durante todo el vuelo. No tenía ganas de nada, y era obvio que BaekHo me iba a preguntar por el repentino viaje de regreso.

Tomé mis maletas, y apenas despidiéndome de Vernon me fui hacia mi casa, a mi supuesto "hogar".

Dejé a BaekHo en la pista, ni siquiera me despedí de él. Así que ahora mi teléfono comenzaba a sonar insistente por sus llamadas.

Llegué a mi destino, pagué al taxista y bajé con todas mis cosas, apenas abrí la puerta un ruido proviniente de la habitación de Yoona me recibió, la muy perra estaba teniendo sexo.

Ignore el hecho y me fui a mi habitación, dejé las maletas en la cama y volví a salir, está vez a un restaurante cercano para poder comer.

Tomé mi celular al regresar a casa y noté que había muerto, lo deje cargar en la mesa a lado de mi cama, me cambié de ropa y me dispuse a dormir aunque sea un poco.

*Ren

Llame a Jonghyun poco antes de abordar el avión, quería preguntarle sobre lo que me había dicho Tae, era obvio que algo tenía que ver él. No por nada su nombre apareció en las noticias.

Pero no contestaba, me mandaba a buzón, mordí mis labios antes de apagar el teléfono y por fin subir al avión.

Eran las 11 de la mañana cuando llegué a Seúl, me dirigí a casa de Tae, me iba a quedar ahí el tiempo que me permanezca aquí, ya que no tenía un lugar a donde ir.

Toqué la puerta tres veces antes de que se abriera.

– Ren! Hace tiempo que no te veo. Pasa. – me dijo con una sonrisa dándome espacio para entrar.

– Perdón por interrumpir de esta manera Hyung, Tae dijo que no había problema si me quedaba.

– Claro que no hay problema, eres nuestro amigo. Puedes dejar tus maletas en el cuarto de huéspedes, está al final del pasillo subiendo las escaleras.

– Gracias. Por cierto, dónde está Tae?

– Salió a buscar trabajo, no debe tardar. Pero yo debo salir ahora, mi turno está por comenzar. Nos vemos luego

Nos despedimos, HoSeok se fue y yo subí las maletas a la habitación que me dijo.

Me dí un baño rápido, y salí en dirección a la empresa de mi padre. Sin duda MinSeok debe estar ahí.

Bully (JRen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora