Narra Nico di Angelo
Anna soltó una lágrima que llegó a mi rodilla, no quería que sufriera en silencio, pero es mi culpa, en realidad la razón por la que la bese al principio fue por que me contrataron para enamorarla y tenerla cerca para que no le pase nada, me dijeron que para enamorarla tenia que hacerla sonreír pero cada vez que sonríe yo me enamoro mas de ella, tenia que decirle algo puesto que ella seguía apoyada en mi, quería decirle la verdad de mi pasado pero si le digo tal vez me deje, y en este paso no me interesa lo de el contrato, me interesa por nuestra relación, -Anna si te cuento algo me prometes que no me tendrás miedo- dije casi temblando puesto que mi pasado no es el mejor, -si Nico tranquilo entenderé lo que me digas, tranquilo por nada del mundo te tendría miedo- dijo mientras me daba un beso en la mejilla, me sentía terrible, tenia que decirle la verdad, -Anna yo...- no podía, me rompería en mil pedazos, -mi pasado no es el mejor de todos, cuando tenia 6 años nos quedamos sin dinero para mantenernos a mis hermanos, yo y mi madre, empezó a salir por las noches y regresaba la mañana siguiente con un poco de dinero, y así continuo por mucho tiempo asta que un día se fue en la noche y no regresó en 5 días, hasta que llego con tres hombres matones, mi madre nos dijo que no podía mantenernos más pero nos lo dijo con la expresión más fría que nos pudo haber dado alguna vez en nuestras vidas, los hombres se empezaron a acercar a nosotros, yo corrí y tome un arma, les dije que se fueran pero no hicieron caso, dispare a todos lados sin ver hasta que Jason me detuvo, había matado a los tres matones y... a mi madre ese día, nos escondimos en las sombras desde entonces, Jason fue el que se unió a la pandilla primero y fue lo mejor para todos- dije con los ojos llorosos, no lloraba por mi pasado si no por que no le dije a Anna la verdad de por que estuve con ella, -tranquilo está bien, no eres el único que tiene un pasado oscuro- dijo dándome una sonrisa,
-cuando era niña mis padres no tenían dinero, éramos pobres en otras palabras, pero todo era sonrisas, mis padres eran perfectos para mi, ellos eran mi mundo, pero un día murieron en un tiroteo, mis tíos me mandaron a un orfanato de monjas donde ahí me prepararían para ser monja si no me adoptaban, así pase mis años asta que cumplí 12 unos hombres llegaron, parecían unos viajeros de momento, y hubiera querido que lo fueran, pero una noche decidí ir por un simple vaso de leche, ellos estaban ahí en la cocina, me empezaron a decir de lo bonita que estaba y que bien me veía, como estaba chica no me importó y continué, pero uno de los hombres me empezó a tocar, no pasó de más haya pero fue tráumente para una niña de 12 años, ellos me enseñaron a bailar hasta los 16 años que me dijeron que hipnotizaba con mi baile, lo tome enserio y pensé usarlo en su contra un día, y así fue, una noche me llamaron como siempre pero estands les baile más cerca de lo usual, literalmente los deje dormidos en cierto sentido y en ese momento los noquee, las monjas vieron lo suspendido y despidieron a los hombres, meses después me adoptó una señora tan dulce y buena que aprecia un ángel, pero su esposo era el diablo encarnado, cumplí 17 pero meses después mi padre no vino por una semana, en esos días empezaron a matar gente y encontrar cuerpos, hasta que un día mi padre llego con un arma, mi madre me escondió pero no me alejé para ver que pasaba, mi padre le apuntó a mi madre con el arma, me pregunto donde estaba pero no contestó, esa noche mi padre asesinó a mi madre a sangre fría, y yo no hice nada al respecto, después de eso unos hombres llegaron a buscarme para llevarme con el, pero no lo hicieron por que los maté, ese día fue la ultima vez que yo bailara, me prometí que no lo volvería a hacer sin excepción, hasta ahora e cumplido mi promesa pero lo que me preocupa es que mi padre te mando a ti, esto es real Nico? O solo es por mi padre- dijo separándose de mi, ya lo descubrió, no podía decirle la verdad si no me quedaría solo otra vez, me acerqué y la bese, un beso apasionado que tuvo que parar por falta de aire, amaba esos besos no podría vivir sin ellos,
-crees que no amo tus besos?- dije dándole una sonrisa la cual ella correspondió, -lo sé, lo siento por decir eso- dijo mientras me acariciaba mi mejilla, no lo hagas por favor me hace sentir terrible, esos pensamientos golpeaban mi cabeza, por que tuve que ha rotar hacer algo tan terrible, nunca pensé arrepentirme, acaricié su mejilla mientras la miraba a los ojos, ese era mi mundo perfecto, al menos en ese momento, desvié la mirada, no podía hacerle eso, me separe y me paré, -vamos a comer que nos están esperando los chicos- dije muy serio no lo quería decir así pero me odiaba a mi mismo por enamorarme de la que NO me debía enamorar, ella me miro con rareza pero luego me sonrió mientras se paraba y caminaba frente a mi, cuando me dejo de ver solté una lagrima de dolor y odio a mi mismo, luego recordé que yo no debía llorar, así que me puse serio como si nada y baje con Anna.