Un sonido especial

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"No me lo creo"

"No me lo creo"

"¡No me lo creo!"

Se repetía una y otra vez el rubio sujetando su cabeza. La temperatura había bajado abruptamente, pero su cuerpo ardía.

–¿Que te pasa, Sanji?– preguntó Usopp, sacándolo de sus pensamientos internos.

El aludido le miro, sus manos seguían revolviéndose en su cabello. Dejo que los segundos avanzaran de manera lenta en el tiempo que se detenía a mirar al moreno de nariz larga.

Ambos permanecían sentados en el piso en la habitación de Sanji. La iluminación venía del sol que se colaba por la ventana en ese deslumbrante cielo azul, una mesita redonda de patas cortas era la superficie solida donde están dispersados sus libros de textos, lapices y más.

–Eh... Usopp.
Con aquellas palabras él pudo descifrarlo, era obvio que intentaba decir algo que le costaba formularlo en una pregunta.

–...¿Contestaste la pregunto tres? Esta muy complicada.– terminó por decir. Acercó su libro abierto de par en par, luego siguió él, acomodando su cuerpo al lado de su amigo para poder recibir ayuda.

–Sanji– suspiro con pesadez–, te conozco bien y se que me estas... ¡Whoa! ¡No has hecho nada!– grito sorprendido al encontrar las hojas de respuestas en blanco– ¡¿En que estas pensando?!

–¡Yo no pienso en nada!– negó sonrojado– ¡Te he dicho que son muy difíciles!

–No te distraigas, tenemos que entregar este trabajo mañana, luego nos tomaran examen. No quería decirlo hasta que tu me hablaras del tema...–Cerró el libro y le miro–, pero últimamente estas en las nubes.

–¿Yo en las nubes?– preguntó con ironía, para luego bufar.–. Nada de eso Usopp.

Él tomó esas palabras como una estúpida y mala actuación por parte del rubio. Decidido a ignorarlo, enfocando su vista en las paginas del libro, escuchó una melodía, mas bien, una pequeña parte de una canción. La habían escuchado varias veces cuando solo se sentaban a hablar de disparates en el verano, aquella la que normalmente Sanji solía decir que era una idiotez, pero ahora, era un breve tono de mensaje.

–¿Y eso?– preguntó curioso.

–Un mensaje– sonrió nervioso.

–¿Nami? ¿Vivi? ¿Violet?

–No es ninguna de mis bellas damas.

–¡Escuche mal! ¡Sanji, el amante de las mujeres, no tiene a una de sus damas con ese tono!– gritó por la ventana.

–No lo anuncies a medio mundo– Lo pateó haciendo que el moreno perdiera el equilibrio y por poco cayera del segundo piso.

–Estuvo cerca.

Mr.Bushido_15:12
Estuve ocupado, por eso no pude escribirte, acompañe a un amigo a un lugar. Ahora tengo que esperarlo.

Mr.Prince_15:13
Por mi no hay problema, yo estaba haciendo tarea con un amigo. Ahora no parece muy feliz, este chico se desanimo por casi caer de la ventana jaja.

Mr.Bushido_15:15
¡Lo haces sonar muy natural! No es como caminar por la calle y tropezarse.

No, espera, imagine a uno de mis amigos que se alteraría demasiado en ese tipo de situaciones, es gracioso.

Mr.Prince_15:16
No estoy loco, este tipo hace las mejores expresiones, es muy divertido.

Mr.Bushido_15:17

Por ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora