Kiroly: El resurgir de la leyenda

Capítulo 5: El origen de Kiroly

El sofá se había vuelto incómodo desde hace rato y Dandie se había movido al suelo todavía más cerca de la chimenea para entrar en calor pues estaba completamente quieto, Furiel había estado en su sitio sin decir ni una palabra desde que Dandie había comenzado a leer. Dandie decidió romper el hielo y empezar una conversación.

–¿Qué lees?

Furiel le miró sorprendido, aunque no pareció molesto que Dandie le hablara sí que le pillo desprevenido.

–Un diario. –hizo una pausa– Un diario de mi hermana, lo escribió hace tres años.

–¿Sobre qué es? –Dandie cerró su libro y al verlo Furiel le imitó– Si se puede preguntar.

–Este es más bien personal, aunque no privado. –soltó una carcajada– Si fuera privado no lo habría leído.

Se hizo un silencio incómodo.

–Mi hermana se fue hace dos años de casa, con dieciocho. –sonrió levemente– Esos dos últimos años estuvo muy diferente y distante, supongo que querría irse ya.

–Yo no tengo hermanos, bueno, tengo a Zeyra. –dijo Dandie– Aunque no es sanguíneo.

–Créeme, la sangre no importa. Lo que importa es –se golpeó el pecho con el puño– lo que está aquí dentro.

Ambos soltaron unas risas y siguieron conversado, el ambiente estaba relajado a diferencia de antes y ambos disfrutan de hablar con el otro.

–Entonces... ¿Por qué estáis de viaje?

–¿Conoces la leyenda de las cinco armas legendarias? –Furiel se dió la vuelta sobre si mismo y se tumbó boca abajo para poder mirar a Dandie directamente. Negó con la cabeza y Dandie siguió hablando– Hemos crecido escuchándola en todos los lugares a los que íbamos, es muy conocida y le suele gustar mucho a los niños.

"Hace muchos años, más lejos de aquello que nuestros libros de historia abarcan, había una bellísima tierra que se mantenía en una armonía constante gracias al compañerismo y la colaboración de todos los que la habitaban. Este hermoso lugar tenía montones de diferentes culturas y civilizaciones divididas por todo el territorio, y cada una de ellas tenía un representante que se reunía con los otros representantes cuando era necesario tomar decisiones para el bien y la prosperidad de todos, siempre tendiéndose la mano como símbolo de ayuda de unos a otros. Este conjunto de personas se llamaba "Los Copularios", y aunque muchas personas hayan teorizado el por qué de su nombre, la verdad es que nunca se ha sabido el motivo real. Algunos piensan que es porque se sentaban en un círculo y que como tenían que enfocar todas las situaciones desde diferentes puntos de vista, escogieron el nombre de una figura de base circular, pero con varias dimensiones. Otros dicen que simplemente se reunían bajo una cúpula, y de ahí el nombre.

Esa época fue la era dorada del progreso: el aprendizaje y la enseñanza sobre este. Pero hubo una persona que demandaba poder, y que no le importaba el camino que tuviera que seguir para conseguirlo. Se trataba de un copulario, pero que había sido poseído por la avaricia y el egoísmo. Sus amigos y compañeros trataron de hacerle ver la verdad sobre como ese comportamiento solo desencadenaría en separación y desequilibro, pero él no escuchó. Era un poderoso druida que no tardó en acabar con las vidas de todos sus demás compañeros. Y que no mucho tiempo después sometió a todo el continente bajo su poder.

Por suerte, un grupo de cinco amigos se armaron de valor para entrometerse en los planes de ese humano que había perdido su alma. En ese grupo se encontraban dos hermanos: Napad y Braneli, que fueron quienes dieron el golpe final para acabar con el dictador. No se sabe exactamente cómo lo consiguieron, pero cuenta la leyenda que cinco armas quedan ahora esparcidas por diferentes lugares, y que a pesar del tiempo que ha pasado desde entonces estos objetos siguen manteniendo su poder original."