Una Reina Para Un Rey (Libro # 1)-park jimin

no me dejes danii

Me encontraba en el bar del hotel en donde el día de ayer habíamos llegado algo ebrios, pero si soy sincero la que llego al literalmente fue danii la cual bailo, bebió y tuvo una noche la cual fue inolvidable, aunque estoy seguro que lo fue más para mí que para ella. Y es que al parecer olvido por completo todo lo que ocurrió anoche. Lo más gracioso es que esta mañana a pesar de la explicita resaca no demostraba estar demacrada por el alcohol, es más se levantó de la cama e hizo todo de costumbre sin quejarse en lo más mínimo, mientras yo la observaba en lo que tomaba mi café matutino.

Me habían sacado de mi habitación con el fin que los estilistas que había contratado para ella tuvieran su espacio y poder prepararla, lo cual estaba más que extasiado ya que estaba seguro que quedarías más hermosa de lo ya es, y es que para ser sincero he organizado todo para que danii compita en el mejor acompañante de vinos, con lo cual hable y organice todo para la demostración con Vanessa fleury, que además de ser su chef era su hermana, lo cual estuvo más que complacida con ayudarme, claro que ninguno le dijo palabra alguna, ya que no queremos que ella se ilusione, y que tal vez no haya ganado, lo último que quiero es ver el rostro de desilusión de mi fierecilla

Llego a la habitación luego de ser avisado que ya danii estaba lista, y me encuentro con ella con un vestido color azul al cuerpo lo cual parecía una segunda piel, llevaba su cabello de lado sujetado de una manera muy natural y su maquillaje no era para nada estrafalario, la verdad era que estaba jodidamente sexi, y en ese momento solo pensaba en hacerla mía, no podía negarlo esta mujer me calentaba en cuestión de segundos.

-te vez jodidamente sexi...-al decir eso daniii dio un respingo, al parecer no sabía que yo me encontraba allí

-diablos park me diste un susto de muerte-era gracioso porque siempre decía lo mismo, pero hoy no quería que me llamara park, quería que me llamara como lo hacía el día de ayer , quería que me llamara jimin, cuando salía de su boca era majestuoso y único

-creía que ya me habías visto, ¿estas lista? llegaremos tarde-danii se acercó a mí, y ajusto el nudo de mi corbata que al parecer estaba suelto, pero creo que lo hizo sin darse cuenta, y el solo hecho de que lo haya hecho, hizo que mi corazón latió descontrolada mente, y solo pude besarla de manera dulce pero posesiva mente, lo cual fue magnifico

La tome en mis manos y no me percate en que momento ya estaba levantando hasta la cintura su bello vestido a mi fierecilla, y la coloque de espalda frente a mí en donde me quite el pantalón, y la penetre de una estocada, pero estaba tan necesitado de ella que al sentir lo húmeda y preparada que estaba para mí, solo pude hacerlo de manera rápida, danii gimió al sentirme dentro de ella, intentaba no despeinarla y no arruinar lo hermosa que se veía, pero si soy sincero para mí no había mejor concepto de danii, que cuando tenía sus mejillas coloradas por la excitación, y los labios rojos e hinchados, después de habernos besado de una manera tan desesperada como casi siempre solíamos hacerlo

-más ji... park más- dani se detienen antes de decir mi nombre, lo cual hace que desaliente un poco, pero no me importa, si ya lo intenta decir es un gran avance, y lograre que lo diga con tanta fluidez como si conociera ese nombre desde mucho tiempo atrás.

La tomo de la cintura de manera fuerte, y aumento mis estocadas haciendo que los sonidos al chocar el no con el otro me excite más, logro hacer que nos corramos al mismo tiempo lo cual es la gloria escucharla gemir, al igual que yo, observo el reloj de mi mano y me percato que se nos está haciendo tarde, así que decido apartarme de ella y dirigirme al cuarto de baño para poder asearme y estar listos para poder salir.

-esto es maravilloso, cada evento me sorprende más, aunque no es o de menos esta es la última gala y la entrega de premios tiene que ser impresionante ¿no lo crees?-danii se quedó sorprendida al llegar de lo elegante y acogedor que habían preparado el salón del hotel para el evento, pero tenía razón era la última gala era lo menos que podían hacer