¡Explorando un desconocido con Yosafire y el cabeza hueca de Ivlis! {CORREGIDO}

Capitulo 2

Hace un hermoso día afuera, podía escuchar el suave cantar de las aves, y sentía la agradable brisa que entraba por la ventana; a veces miraba al frente, miraba a Kcald quien, como casi todas las veces, sufría cuando jugaban una partida, trataba de evitar soltar risas aunque le era muy difícil al ver esos gestos tan chistosos reflejarse en el rostro de su querido Diablo.

Y aunque la tormenta había pasado, sabía que en algún momento del futuro pasaría otra, y posiblemente mucho más fuerte pero, para ese momento, estaría preparada, protegería a todos sin importar qué u nadie saldría herido, Kcald no saldría herido.

-Etihw, es tú turno...-

La cálida voz del Diablo la saco de sus pensamientos, aunque sonaba algo preocupado ¿Cuánto tiempo había estado divagando como para que Kcald se preocupara?

-¡Oh! Cierto...-

Miro las fichas con atención y pensó en su jugada, aún sentía la mirada de su acompañante sobre si.

-¿Sigues pensando en lo que ocurrió?-

-...-

-Deja de pensar en eso, siempre hay tiempos...difíciles, así que, mira el lado bueno, todos estamos en una pieza ¿no?-

-...jum...Vaya, ¿Estas animándome? Eso no lo veía venir-

-¡C-cállate!-

Dejo salir una gran carcajada, Kcald siempre lograba alegrarla; debía disfrutar de estos ratos lo más que pudiera, después de todo, nadie sabe qué ocurriría mañana ¿no?...

-¡...!-

Las grandes puertas de la habitación fueron abiertas por cierto ángel de cabello rubio, la querida amiga de Yosafire.

-¿Froze? ¡Me alegra verte!-

-Señorita Etihw, Señor Kcald, me alegra verlos-

Aunque fue un educado saludo, se notaba la agitación y la preocupación en su voz, tanto Etihw como Kcald se alarmaron.

-¿Qué te trae por aquí? No creo que nos hayas traído uno de esos sabrosos pie's de Dialo ¿Verdad?-

-Me temo que no, Señorita Etihw ¿Ha estado Yosafire por aquí? La he estado buscando pero no la encuentro desde esta mañana-

-Por aquí no ha estado pero, ¿no la buscaste en el jardín? Sabes que ama ir allí-

-Le prohibí ir al jardín hasta nuevo aviso pero...pensándolo bien... ¿Cuándo esa tonta me ha hecho caso?-

El ángel dejo escapar un suspiro, quería mucho a su amiga pero, a veces solo deseaba golpearla tan fuerte como para noquearla

-¡Exacto! Bueno, así es nuestra Yosafire ¿no?-

-Entonces, me despido, siento haberlos interrumpido-

-¡No te preocupes! Dale un saludo de nuestra parte, y de paso, que todo pie de manzana es bienvenido aquí ̴!-

-y hay vas con los dulces...-

-¡Oh! Vamos Kcald, tú amas el pie de Dialo, no lo nie...!-

Repentinamente, Etihw se puso de pie, con una expresión bastante sombría en su rostro.

-¿Qué sucede?-

Froze preguntó bastante alarmada; desde el incidente con el Diablo de las llamas, sabía que la diosa Etihw se dedico a esparcir miles de piedras, tantas como pudo, de esa forma podría saber si algo o alguien llegaba a su mundo, tenía un mal presentimiento.

-Tenemos un visitante inesperado-

-Y por tú mirada no creo que sea para bien-

-No lo sé Kcald pero, ruego que lo sea-

Regresemos al presente; Ivlis bastante molesto e irritado junto a una Yosafire que estaba bastante confundida, lo único que podía asegurar es que el Diablo de la Flama debía irse.

-¡Yosafire! ¡Aléjate de él ahora mismo!-

El grito de Froze despertó a Yosafire de su confusión, debía alejarse pues el ambiente estaba demasiado tensó; miro al Diablo de las llamas y con una sonrisa burlona.

-¡Bueno! ¡Suerte en tú desgracia!-

Lo que le pasará a ese Diablo no era de su incumbencia y menos cuando intento destruir su querido hogar.

Pero...como sabéis, esto es una historia y ambos deben estar juntos para que avance así que...

-¡Oh no! ¡Tú vienes conmigo mocosa!-

-¡¿Qué?! ¡Wuaaaa¡ ¡Froze!-

-¡Yosafire!-

El Diablo de las llamas, pensó rápidamente en una forma de salir de esta y sin desperdiciar más tiempo, sujeto a Yosafire y la aprisiono, sujetando su cuello, ¿Qué mejor que una rehén para asegurar su vida?.

-¡Suéltala ahora mismo!-

Etihw muy contenta no sé escuchaba, eso estaba claro, y mucho menos Reficul, quien con una mirada fulminante le observaba, Ivlis debía aprovechar y rápido.

-¡Suéltame viejo! ¡Froze!-

-¡Será mejor que se queden en donde están o la mataré!-

La demonio lloriqueaba mientras forcejeaba; Ivlis la arrastraba hacia el portal con la poca fuerza que le quedaba, agradecía que la demonio fuera débil; Reficul, Frize y Etihw observaban con ira pura la acción del Diablo, bueno, no importa a donde fuera, siempre sería encontrado por Reficul, siempre...

Un poco más, Ivlis veía su libertad...durante poco tiempo pero al fin y al cabo era libertad ¿no? El portal era pequeño, solo debía soltar a la mocosa al momento de entrar y se iría, lo haría muy rápido y eso hizo...

-¡Suéltame viejo pervertido! ¡Deja de tocarme!-

-¿De qué diablos hablas?-

Yosafire lloriqueaba y se quejaba por toqueteos pasados de tono, creyó que sería ese Diablo pervertido que la tenía como rehén, pero...al parecer no era así o al menos eso pudo asegurar al mirar la expresión extrañada de Etihw y Reficul y esa mirada asustada de Froze además de que, Ivlis se había callado, estaba en silencio.

Continuara...