Existen miles y miles de mundos desconocidos, demasiados como para contarlos a cada uno de ellos pero, ¿porque no visitamos uno? ¿Te agrada Yosafire verdad? que mejor demonio para que sea nuestra protagonista! y solo hace falta un compañero...¿Ivlis...
Ada suspiro, tan temprano en la mañana y lo primero que retumba sus oídos eran los gritos de su mejor amigo.
No entendía ¿Por qué Arca no podía aguantarlo? Es decir, no es como si aquel ser que intento matarlo innumerables veces para obtener su cuerpo fuera a hacer algo malo ahora mismo.
-Vamos, Arca, no es para tanto –Aunque intentaba calmar a su compañero, refunfuños y murmullos llenos de rabia contra aquel ser que habita en su cuerpo salían de la boca del Dios-
-No puedo creerlo...¡¿Cómo es posible que te hayas dejado engatusar por ese imbécil?! –Ada volvió a suspirar, será mejor ignorarlo- ¡No! ¡No! ¡No! ¡Me niego a que vuelvas a darle tú cuerpo!
-Lo tengo controlado con mis listones, sabes que no se me...-Una mirada fulminante por parte de Arca lo silencio, su compañero era bastante...- ¿Estas...hmmm?
-¿Qué?-
-Es decir, siempre te molestas cuando hablo con él y pues...-No pudo evitar soltar una carcajada- No importa...jeje
-¿Cómo puedes pensar eso? ¡Ese engendro me molesta siempre me ha molestado y ahora mucho más que le has dado libertad de usar tú cuerpo durante cierto tiempo! Ese miserable engendro...algún día....voy a destrozar su ridícula cara...
-Si destrozas su cara, me destrozaras a mi ¿Sabes? Recuerda que somos uno –Otra carcajada salió de su boca-
-Me lleva la...es verdad...ese engendro...ugg...-
Ada sabe que en cualquier momento, Arca aceptaría a ese ser destructor, aunque pasarían algunos años antes de eso, años llenos de rabietas y cansadas discusiones...Suspiro, sería un largo tiempo.
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