♥JUNTOS ♥

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- Tu padre va a despedirme, lo sabes verdad?- decía Nam mientras viajábamos rumbo al hospital, luego de escapar de los guardias que estaban custodiando mi departamento.

Luego de la fría y angustiante charla que había tenido con mi padre, el muy maldito había mandado a poner seguridad para quien no abandonara el lugar. Como si eso iba a detenerme.

-No te preocupes Nam, te haré mi secretario.- Nam rió, obviamente no podría pagar sus honorarios.

Giro en la entrada del garaje del hospital y aparcamos disimuladamente. El hospital también estaba custodiado pero por al gente de Lee.

Nam saco su teléfono y marco.

- Estamos abajo- dijo frío y colgó.

Teníamos un contacto dentro que nos haría entrar por la lavandería.

El joven enfermero, con los ojos asustado como sirvo encandilado por la luz nos dejo pasar por la puerta de servicio. Nam le dio un pequeño rollo de billetes y el asustado chico nos guio hasta la entrada de la sala vip.

- No puedo llevarlos mas adentro, ahora tendrán que pasar ustedes por los de seguridad.- dijo y salio despedido tan rápido como sus piernas le permitían.

- Bien distraeré a los guardias mientras te metes- dijo Nam. 

- Como los distraerás?- dije sorprendido, no esperaba que Nam tan recto como era estuviera tan dispuesto a tal locura con migo.

Nam entro como si nada, un grupo de hombre intentando detenerlo, Nam resistiendo. Namjoon es un hombre grande y fornido, no es facili lidiar con alguein como el cuando se pone testarudo.

Los guardian automaticamente lo abordaron, Nam comenzo a resistir una enfermera que pasaba grito y todo se volvio un caos. Aprovechando la confucion me adentre a la habitacipon.

El lugar estaba sumannet iluminado por la entrada de la liz de sol. Jimin dormia. Mi hermoso Jimin.

Me acerque lentamente, su pequeño rostro amoratado y lastmado, venia que su piel blanquecina tenia manchas moradas en el cuello y antebrazo, producto del forcejeo. 

Mi corazon se helo, no habia tenido en cuenta cuanto daño ahbian ehcho a Jimin, cuanto daño hizo mi padre a Jimin.

Ira, dolor, frustración  e impotencia. Mis sentimientos iban y venia mientras intentaba contener la punsada en mi pecho, mis ojos dolían, quería tocarlo, escuchar su voz.

Jimin se movió y me quede congelado, que tal si Jimin no quería verme, después de todo era mi culpa que esto le haya pasado. Maldito destino el que nos atravesaba.

Jimin abrió apenas sus ojos.

-Ju-n-gkook?- dijo casi en un susurro, estiro su mano y me abalance a recibirla. La besa, estaba fría, sus pequeños dedos estaban raspados. Otra vez sentía culpa de todo lo que había ocurrido.

-Siento- siento- no haber llegado- dijo. y mi corazón se desbordo, las lagrimas comenzaron a caer son control, toda la ira, todo la impotencia todo el amor que sentía por Jimin estaba derramándose en ese instante mientras sostenía su lastimada y fría  mano entre las mías. No podía hablar, no podía mirarlo, solo podía lamentarme y llorar.

Jimin levanto su mano y toco mi rostro intentando hacerme elevar mi mirada. Lo mire, su rostro golpeado, dañado, su perfecto rostro. Acaricio mi mejilla y limpio algunas lagrimas. Apenas y si podía contener los lastimeros gemidos que intentaban salir de mi garganta.

- Jungkook- dijo esta vez con su voz mas firme- no es tu culpa.- como podía decirme eso, como podía creer si quiera que no era mi culpa?.

Claro que era mi culpa, todo lo que pasaba con este pequeño chico había sido mi culpa. desde el momento en lo vi por primera vez, tan curioso, tan pequeño. en el momento en que lo ame. todo fue mi maldita culpa.

- Ven aquí- dijo y como si me estuvieran ofreciendo el cielo me abalance a sus brazos y respire profundo su olor, que ahora estaba contaminado con antibiótico y esterilizarte. Recosté mi cabeza en su pecho, su pequeño corazón agitado bajo mi oído y yo no quería separare jamas de ese pequeño ser que me había vuelto totalmente a sus pies.

- Ya no llores- dijo y me di cuenta que estaba desbordado, como nunca antes me había sentido, como nunca antes lo había hecho. mi pecho dolía, quería levantar lo de esa cama y llevármelo a donde sea, pero alejarlo de todo esto. 

- Lo- siento- dije entre gemidos-

Jimin levanto nuevamente mi rostro hacia el suyo.

- No fue tu culpa, Jungkook, no fue tu culpa.

Me levante de su cómodo pecho, y me dirigí a sus labios, esos pequeños relieves tan inflamados y agrietados, necesitaba besarlo, necesitaba calmar mi agitado corazón.

Jimin me recibió y coloco sus pequeños dedos en mi pelo, acariciando y consolando mi dolor.

Jimin sabia que mis palabras iban mas haya. a todo lo que habíamos vivido a todos a quienes habíamos dañando y mentido a Junji, a su entorno al mio.

Habíamos hecho mucho daño y nos habían hecho mucho daño, pero sabiendo todo esto no podíamos permanecer alejados, era mas fuerte que nosotros, era mas poderoso que todo el dinero del mundo, y no había distancia suficiente para que pudiéramos olvidar.

Lo mire a los ojos y sus ojos brillaban a punto de llorar.

- Te amo...Te amo tanto que duele- dije 

Jimin parpadeo.

-Te amo... - dijo al fin. Era como si con esas palabras podríamos lograr cualquier cosa.

Pero esta vez Juntos....






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PROHIBIDO (KOOKMIN) Segunda parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora