Death Of Today - Tomarry

Parte 2 | CAPÍTULO TREINTA Y DOS

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Parte 2 | CAPÍTULO TREINTA Y DOS

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Lucius estaba sentado en una elegante silla. Tenía ambas manos apoyadas sobre la mesa y miraba cómo avanzaba el segundero del reloj. Su pelo rubio estaba hacia un lado y caía recto hasta sus hombros. Llevaba una túnica negra y plateada con detalles en terciopelo. A su lado cerca de la baranda de la escalera estaba Narcissa con su misma expresión relajada. Su cuerpo delgado y femenino estaba apoyado sobre la ornamentada barandilla cual estatua de mármol en un jardín.

"¿Vendrán?" preguntó ella en voz baja.

"Si Izar dice que vendrán, entonces lo harán," respondió Lucius en un susurro ronco.

Aunque se había recuperado del ataque de Moody aun seguía deformado. Aún no podía usar hechizos para disimularlo ya que podían reaccionar con sus tratamientos. La horrenda cicatriz iba de sus labios a su entrepierna. Si se movía muy rápidamente podía desgarrar la piel que se estaba sanando. Y no era mejor cuando hablaba. Para evitar el dolor, Lucius tenía que susurrar o murmurar cuando alguien se dirigía a él.

Era una discapacidad, pero también un vivo recordatorio de que hubiera muerto aquel día de no ser por Izar.

"¿Crees que es sensato?" insistió Narcissa. "Abandonar la mansión–."

"La mansión va a estar bien sin nosotros, Narcissa." Lucius tamborileó en la mesa con sus dedos sin mirarla. "En cuanto nos vayamos serán mantenidos afuera por las barreras. Seguirá aquí cuando la guerra haya terminado."

El silencio de su mujer no presagiaba nada bueno para la seguridad de Lucius.

"No es solo por la mansión, Lucius, sino por nuestras lealtades. ¿Estás seguro que deberíamos permanecer con el Señor Oscuro? Aunque tenga grandes aspiraciones, la armada de la luz nos está alcanzando. Y Draco adora su colegio; es demasiado joven para tomar estas decisiones."

Lucius siguió mirando el espejo. "Draco tiene edad para decidir su camino, Cissy." Acarició la madera con una media sonrisa. "MI vida le pertenece a Izar ahora. Lo seguiré a donde desee guiarme. Los Malfoy no nos retractamos de nuestra palabra." Los fríos ojos plateados la miraron. "Y se que los Black tampoco."

En ese instante las barreras dieron la alarma y Narcissa se apartó de la baranda mientras se abría la puerta principal. Lucius la miró de reojo y con calma, respirando hondo para recomponerse. Parecía que sus huéspedes habían llegado justo cuando Izar había anunciado que lo harían.

"Señor y Señora Malfoy, tenemos una orden para registrar su propiedad. Si la evidencia buscada resulta estar presente serán arrestados," Shacklebolt anunció su presencia irrumpiendo en la mansión con u grupo de Aurors a sus espaldas.

Lucius inclinó la cabeza hacia un lado con satisfacción mal disimulada. Buscó entre el grupo hasta que sus atentos ojos se posaron en el hombre junto a Shacklebolt. Alastor Moody gruñó al posicionarse al frente, y miró a Lucius con repugnancia. Malfoy respondió con superior indiferencia. Solo sus ojos anunciaban la promesa de venganza. Aunque claro, no le sorprendería que el Auror ni siquiera se diera cuenta de su fiera determinación.

Moody esbozó una mueca burlona con sus indeformadas facciones. Cuando Lucius terminara con él ya no estarían así.

"Veo que de algún modo lograste escapar de tu merecido lugar en la tumba de los Malfoy," gruñó Moody.