04🍃

7.8K 1.2K 218
                                    

El pelirrojo se encontraba manejando hacía la empresa de Taehyung. No sabía si aun estaría ahí, pero tenía que hacer el intento, mañana mismo la empresa de su padre tenía que estar en lo más alto de el ranking de mejores empresas de Corea.

Hoseok manejaba mientras sus manos temblaban un poco al volante, nada de lo que haría sería fácil, pero sólo esperaba que al final de todo Taehyung le dijera "Has caído en una broma, claro que no quiero tu cuerpo" o al menos eso se imaginaba el pelirrojo.

Al final no pudo convencer a Taehyung, pero el castaño si lo convenció a él. El poder de éste era tan grande comparado con el de él, estaba acabado si la prensa se enteraba de lo que estaba a punto de hacer.

Todos lo mirarían con repulsión y más su padre, que siempre lo ha mirado así.

Después de lamentarse en el camino por lo que estaba a punto de hacer, el pelirrojo llegó a la empresa. Su reloj marcaba las 10:33 PM, ¿demasiado tarde, no?, pero no perdía nada con hacer el intento.

Probablemente esa noche sería humillado, y después odiaría su cuerpo, pero él realmente amaba a su padre, y estaba dispuesto a darlo todo por él.

El pelirrojo se bajó de el carro, para después pararse enfrente de la empresa y mirar un poco hacía arriba de el edificio. Las luces de el penúltimo piso estaban encendidas, tal vez el gran Ceo se encontraba aun haciendo unos papeleos.

Hoseok suspiró y se adentro a la empresa, la noche estaba un poco fría, por lo que la punta de su nariz y sus mejillas ya estaban de un color rojo carmesí y sus ojos brillosos.

La pelinegra que lo había atendido esa mañana sonrió al ver a Hoseok y se le acercó.

—–Hola de nuevo—– sonrió Jisoo —–¿estás aquí para ver a el Joven Kim?.

Hoseok saludó y asintió un poco apenado mientras fingía una brillante sonrisa.

—–Bien, por favor ven conmigo. El joven Kim está a punto de irse, pero creo que puedo hacer una excepción contigo—– habló con un tono suave Jisoo mientras caminaba hacía el ascensor.

—–Muchas gracias, es usted muy amable.

—–Oh no, por favor llamame Jisoo, los amigos del joven Kim son los míos —– sonrió Jisoo para después entrar al ascensor.

¿Amigos?, esa escoria no era su amigo. Era un imbécil que se aprovechaba de los demás sólo por su jodido poder.

—–Gracias... Jisoo, eres muy amable—– sonrió Hoseok para después entrar al ascensor junto a la pelinegra.

—–Me encanta tu sonrisa—– la pelinegra se acercó y tocó los hoyuelos que se le formaban a Hoseok cuando sonreía.

Al sentir el suave toque de Jisoo, Hoseok se puso aun más rojo mientras sentía toda su cara arder, la pelinegra era muy linda y tierna a su punto de vista. Cuando el pelirrojo se dispuso a contestar, el ascensor se abrió, dejando ver del otro lado parado a Taehyung, quien los miraba fijamente.

—–Joven Kim, él es el chico que vino en la mañana, ha pedido volverlo a ver y lo he traído si no le molesta—– habló Jisoo mientras dejaba de tocar las mejillas de Hoseok y se enfocaba en Taehyung.

El castaño estaba parado frente a ellos con sus manos en sus bolsillos de el pantalón y una mirada neutra en Hoseok, intimidándolo. El pelirrojo al sentir la intensa mirada de Taehyung desvío la mirada hacía un lado un poco nervioso.

—–Es un gusto volverte a ver, Hoseok—– sonrió Taehyung mientras seguía mirando a el pelirrojo.

—–E-el gusto es mío, K-kim—– habló Hoseok muy nervioso.

—–Supongo que tienes un asunto muy importante que atender, por eso has venido a estas horas bestiales de la noche.

El pelirrojo asintió con la cabeza mientras seguía sin mirarlo a los ojos. Sentía que Taehyung lo estaba tomando por completo con la simple mirada, eso lo ponía demasiado nervioso.

—–Bien Hoseok, vamos a hablar a mi oficina—– sonrió el castaño mientras se daba la vuelta y empezaba a caminar, aun teniendo su pinta de chico malo.

Hoseok miró a Jisoo y le agradeció, para después ir detrás de Taehyung.

El castaño entró a su oficina y le ordenó a Hoseok que cerrara la puerta, a lo que el contrario obedeció sin ningún problema.

—–Y bien, ¿qué se te ofrece?—– dijo el castaño mientras se sentaba en su silla y sonreía con lujuria mirando al pelirrojo. Taehyung sabía a lo que había venido Hoseok, pero quería escucharlo de su propia boca, quería que se humillara así mismo.

—–Y-yo seré sincero. Vengo a hacer ese trato contigo—– soltó Hoseok un poco nervioso.

Taehyung volvió a sonreír, todos estaban bajo su poder, y si él quería tener a Hoseok debajo de él, eso se haría.

—–Tomaste una muy buena elección. Todas las perras que he tenido no se habían rehusado, en cambio, tú lo hiciste—– sonrió Taehyung—– pero tú no eres la excepción, eres como todas esas putas que venden su cuerpo para obtener poder —– el castaño se paró de su silla y se acercó a Hoseok, poniendo sus manos en la cintura de éste y acercarlo más a él.

Los labios de Taehyung rosaron el oído de el pelirrojo, haciendo que éste se asuste —–¿Y sabés qué?, eso me excita demasiado. Me excitan las perras que aparentan ser difíciles, pero al final son sumisas. Y ahora mismo, tú estás siendo una de ellas.

Actualización a las 5:30 AM pork si porcinas. Y ahora a ver como colapsan.

 Y ahora a ver como colapsan

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
•Gran CEO• VhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora