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Chapter name: ''No puedo y tu lo sabes''


Habían subido todos los muebles en poco tiempo, estaban sentados uno al lado del otro. En esa parte trasera de los camiones de carga, donde no va la gente porque es peligroso, los muebles se movían y se podía caer algo sobre alguien.

Exactamente esa.

La chica llevaba cabeceando hace un rato. Aunque solo habían emprendido viaje hace 10 minutos.

Se había quedado hasta tarde, la única razón fue por hacer un maratón de series. La consecuencia de ello fue dormir escasas 3 horas la noche anterior.

El mayor. No estaba mejor, aunque él por otro tipo de problema.

Los héroes falsos eran problemáticos a la hora de las batallas. Preocupados por entrenar tanto sus cuerpos y estrategias olvidaban rápido su motivo. 

Ambos estaban cada uno en lo suyo. Callados como tumbas.

El revisaba las noticias por su teléfono, simplemente revisando si su asesinato ya se había hecho público.

 Estando en lo cierto, los noticieros eran rápidos.

Y ella escuchaba la música del conductor mientras rezaba no quedarse dormida y darse la cabeza contra la pata de una silla que tenía al lado.

Se había dejado su reproductor de música en la mochila, metida en algún lugar entre cajas, la misma desdicha ocurrieron con sus audífonos. No era normal de ella olvidárselos. 

Estaba cansada. 

El hombre la miró de reojo, ya podía saber que había hecho. Sus ojeras no eran de lo mas disimuladas—¿A qué hora te acostaste anoche?

—a las 3 de la madrugada. No te vi llegar.

La miró con cierta extrañeza, normalmente no hacía esas impulsividades, pero no diría nada al respecto.

Suponía, que tenia destellos de idiotez. 

No esperaría algo distinto. Era joven.

—llegue a las 5.

Aunque el hombre habría tenido poco y nada de sueño. Estaba bien. a diferencia de su hija.

Sonrió ligeramente. —Después te quejas de mí.

Silencio, era lo único que recibía en respuesta, el viaje era largo. Lo cual terminó en cierta menor quedándose dormida, usando cómodamente el hombro ajeno para dormir más plácidamente.

Le bastaron los cinco minutos de silencio para caer como muerta. 

Nadie podía culparla, era temprano, y el ambiente era tranquilo, que el mismo hombre el cual desconfiaba de su propia sombra. 

Quería descansar.

Aunque por más que obvios motivos no lo haría. No se sentía seguro con un extraño al volante, pero tampoco tenían el dinero o los medios de hacer ese viaje sin dificultades, o mejor dicho de forma legal.

Miraría a la chica unos pocos segundos, era raro verla sin una mascarilla cubriendo casi todo su rostro.

No había tenido muchos momentos como ese desde que ella había dejado de ser una niña con miedo a la soledad. Quizás por eso tampoco quería perder ese pequeño momento.

¿Se había vuelto algo emocional con ella cerca?

Quizás, ni el hombre lo sabia. 

Era muy nostálgico, recordar aquel viaje por primera vez al departamento. que hace años dejaron atrás

Bloodstain.(𝑩𝑵𝑯𝑨)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora