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Chapter name: Incapaz de pasar desapercibida. 

Un salón de actos escolares, aquellos donde las capacidades eran enormes, usado en eventos importantes.

Estaba completamente repleto de miradas, expectantes a lo que ocurría enfrente de ellos

Fuertes ruidos retumbaban por todo el sitio, no eran agradables, al menos no para quien lo sentía

Un golpe

Dos golpes

Tres golpes.

Sucesivos, no tenía escapatoria de ellos.

Tirada en el suelo, como si fuera algún tipo de basura inhumana.

''Una villana en potencia.''

Las miradas, horribles miradas morbosas, algunas incómodas, otras simplemente burlonas hacia el dolor físico ajeno.

Iracunda sería la mirada de aquella chica brutalizada.

Una señora mayor, firme, hablando fuerte y claro, 

No solo para la rebelde niña

Para todos los demás

Alzó a la chica desde el cabello, mirándola frente a frente, obligándola a quedarse de pie. —Espero pacientemente cada día, que usted, de un mejor ejemplo tanto a sus compañeros más jóvenes.

Dio una pausa, viendo el estado de su propia estudiante.

Deplorable, quedaba corto.

Moretones en todos lados, una mirada tan cargada de odio, su uniforme tenía polvo y manchas, su cabello largo alborotado por la golpiza. 

Esos ojos carmín oscuro.

Dos lunas bañadas en sangre, como si indicaran la muerte.

Le daba asco.

Le daba miedo.

Dio una bofetada a la chica, tirándola al suelo—Pero no solo soy informada diariamente que usted atormenta a sus compañeros escolares, no hace sus tareas escolares, no cumple con horarios de materias.

Cada cosa dicha por aquella anciana, no estaba errónea.

Pero si distorsionada, exagerada y en ciertas partes mentiras de la envidia. 

Dichas específicamente para hacerla ver mal. 

Ellos querían a una villana.

La mujer dio un golpe en el estómago de la chica con su bastón—He sido informada, que tuvo el atrevimiento de robar el dinero enviado por la familia de su compañera de habitación. ¿Tiene algo que decir frente a ello?

Sin respuesta, la mujer tomó del brazo a la niña arrodillada en el suelo, arrojándola con fuerza hacia un atril con micrófono.

Era tan humillante.

Apoyó su mano en el hombro de la niña, amenazar era su única intención—Tu, si realmente, te arrepientes de tus actos, harías una disculpa pública. ¿Asumirías el peso de tus responsabilidades?

La mujer, de nuevo. No consiguió respuesta.

La niña, solo se quedó allí, viendo a todos ellos.

Con asco, con rabia.

Sintiendo ese característico sabor metálico, sintiendo las uñas clavándose en su hombro. Miro a la directora de aquel infierno.

Bloodstain.(𝑩𝑵𝑯𝑨)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora