Hola minna! , luego de haberme tomado unas vacaciones les traigo de vuelta a nuestra querida pareja minho y taemin. :D. Espero que les guste y sigan dándome mucho apoyo con este proyecto.
muchas gracias por leer y votar!. Sin más, aquí les va!.
Bye Bye~
Minho Pov
Abrí aquel dorado libro en la primera página.
El primer capitulo no tenía ningún título, pero en su lugar se encontraba un pequeño dibujo hecho de tinta, de una hermosa luna llena.
Empecé a leer para mis adentros:
† ☪ †El resplandor de la luna ha cegado tu mente
Ese día estaba completamente dispuesto a confesarle mi amor a Julietta, ella se mantenía rondando mi mente y mi corazón cada segundo de cada uno de mis días desde el instante mismo en que la vi. Recuerdo sus dorados cabellos, largos hasta su cintura, sus profundos ojos color miel con largas pestañas, y su voz, esa hermosa voz que me transportaba al edén cada vez que recorría mis oídos, recuerdo también sus delicados pasos, cada uno de sus movimientos conformaba aquella espléndida danza que era su caminar.
Monté mi caballo para ir a su encuentro.
Era una costumbre entre ambos, todos los días a esta hora, Julietta lograba zafarse de sus asuntos, y me esperaba bajo aquel hermoso arbol de flores rosadas. Pero ese día había un gran vacío en aquel escenario, ni una sombra había salido a mi encuentro, sin preocuparme ni desesperarme, pero con una espina en mi corazón, bajé de mi caballo, y me senté a esperar por ella, tal vez, no habría logrado desencadenarse de algunos compromisos y vendría más tarde.
Conforme pasaban las horas mi preocupación iba en aumento, no había rastro de Julietta, y yo no hallaba que hacer.
No podía ni pensar en acudir a su casa ya que sus padres simplemente me detestan^.
Julietta desprecia los lugares abarrotados de gente, así que las posibilidades de que se encontrara en la plaza o cerca al centro del pueblo eran mínimas, el único ligar que cruzó por mi mente era un pequeño lago, al que Julietta ha querido ir desde siempre.
Ese sitio era mi única esperanza así que fui hasta allí lo más rápido que me fue posible.
Se hacía de noche y ya me encontraba próximo a mi tan esperado destino, lo único que me permitía ver mi ruta, era la luz de la luna.
Al llegar por fin, extrañamente, noté que la luna se reflejaba en algo diferente al agua del lago. Una figura humana. Cuando logré distinguir perfectamente la escena, la vi allí, parcialmente sumergida en el agua cristalina de aquel traicionero lago, su piel estaba totalmente blanca, sus rojos labios, tenían una detestable tonalidad azuleja gracias a la baja temperatura del agua, y sus hermosos ojos, abiertos de par en par, miraban fijamente la luna que resaltaba mi desesperación.
Me abrí paso a toda velocidad entre la flora del lugar cortando la piel de mis brazos en los rosales, poco importaba lo que a mi cuerpo le pasara, hasta que llegué al borde del lago, sin importar nada más, me lancé al agua helada, nadé con las pocas fuerzas que me quedaban hasta aquella figura inmóvil, un solo movimiento me bastó para sacarla del agua. Puse cuidadosamente su cuerpo sobre la hierba.
Ella no respondía.
-J-julietta- la llamé - Querida, contesta - Mi voz era apenas un susurro.
-Julietta no me hagas esto-
las lagrimas empezaron a brotar por los bordes de mis ojos.
-¡¿Que va a ser de mi si te vas?!, ¡Te lo ruego!, ¡No me abandones!, ¡Mi única razón para existir eres tú!, si me dejas, ¡Moriré!-
Mis lagrimas caían de mis ojos directo al rostro de mi querida julietta, la abracé como si nada en todo el universo importara, y así era, si mi bella luz se extinguía mi mundo lo haría también, se desvanecería en un abrir y cerrar de ojos, solo deseaba que todo aquello fuera una vil ilusión, producto de un mal sueño, deseaba desde lo más profundo de mi corazón y mi alma que todo aquello acabara o que por lo menos me llevara con ella.
Y como si pudiera ser verdad, como si por fin el viento soplara a mi favor, Julietta tocio un par de veces, parpadeó, y tocio de nuevo. La alegría no cabía en mi pecho, ella se encontraba bien------
Me vi obligado a cortar mi lectura en ese punto por unos tenues crujidos de madera, me tomó un rato para reconocer, que provenían de la habitación en la que se encontraba............... Aquel chico