Capítulo 3 - El más deseado

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—Perdón, no...— Intenta decir algo, más no termina lo que iba a decir.

He chocado con un chico el cual ahora me está observando de pies a cabeza, lo cual hace que me sienta algo intimidada y un tanto incomoda, pero trato de no demostrarlo así que hago lo mismo con él.

El chico es muy o tal vez demasiado guapo, lo analizo muy rápido, él tiene el cabello castaño, unos lindos ojos cafés, tiene una tez algo clara y me puedo percatar de que una pequeña cicatriz adorna su rostros entre medio de sus cejas un tanto pobladas, no me tomo la molestia de observarlo tanto, cosa que él sí hizo conmigo, pero puedo notar que tiene un cuerpo muy bien trabajado.

—Perdón por chocarte, estaba algo distraída buscando la dirección.— Le digo para romper la tensión o más bien para que me deje de mirar así.

—No, yo no te vi, perdón.— Me dice un tanto aturdido o algo así parece.

—Está bien, no te preocupes, si me disculpas necesito ir a la dirección.— Le digo con una pequeña sonrisa para irme pero él me detiene.

—Oh, si quieres yo te llevo, conozco perfectamente este instituto.— Me dice para que yo no me valla.

—Me harías un gran favor y muchas gracias.— Y ahora si me voy pero acompañada de él.

Al ir camino a la dirección noto que la mayoría de las personas (sino es que toda) que se encuentran en el pasillo se nos quedan mirando o por lo menos a mi, probablemente sea porque soy nueva aquí, así que no le tomo demasiada importancia.

—Aquí es.— Dice y paramos enfrente de una puerta que dice rectoría. —Ah, y por cierto, aquí le decimos rectoría, no dirección.— Me dice algo divertido.

—Oh, muy bien.— Le digo algo apenada.
—Muchas gracias por mostrarme dónde está la "rectoría", nos vemos.— Me despido de él.

Antes de cerrar la puerta escucho que él me dice que espere y me pregunta por mi nombre, cosa que me causa gracia porque no se le ocurrió preguntármelo antes, tal vez y en otro momento se lo diga.

Después de que entregara mis papeles y demás con la rectora, fui en busca del salón en el cual tendría mi primera clase, cosa que me fue más fácil ya que me dieron una hoja donde estaban mis clases con sus salones correspondientes y pues cada salón está enumerado, así que me apresuro en llegar para no entrar tarde a mi primera clase y ya estando afuera abro la puerta.

—Buenos días.— Saludo al profesor. —Puedo pasar?— Le pregunto.

—Por supuesto.— Me dice, a lo que yo entro. —Eres nueva cierto?— Pregunta.

—Sí.— Le digo.

—Soy el profesor Grave.— Se presenta.
—Yo seré quien te impartirá la materia de química, y ahora nos harías el favor de presentarte por favor?— Me pregunta amablemente.

—Oh, claro.— Volteó asía mis nuevos compañeros y prosigo. —Mi nombre es Charlotte Evans y recién me mudé de la ciudad de Kansas.— Me presentó amablemente siendo breve.

—Muy bien, señorita Evans, puedes tomar asiento para poder continuar con la clase.— Me dice y enseguida me pongo a buscar un asiento.

Para mi sorpresa reconozco un rostro familiar y enseguida voy y me siento junto a él.

—Hola.— Le digo en voz baja a Jony.

—Hola, cariño, no sabía que entrarías a este instituto.— Me dice con una gran sonrisa.

—Pues ya me vez aquí.— Le digo también con una sonrisa.

—Ya veo que de ti era de la que hablaban tanto.— Dice y yo enarco una ceja.

𝒞𝒽𝒶𝓇𝓁ℴ𝓉𝓉ℯDonde viven las historias. Descúbrelo ahora