Capítulo veintiuno

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Finn

Editado.

Estiré mi brazo lo más que pude para tratar de alcanzar mi celular que se encontraba muy lejos.
Pero claramente fallé en el intento.

Aclaré mi garganta, preparé mis pulmones y...

- ¡NICK! - Grité lo más fuerte posible.

Se escucharon pasos apresurados y entró a mi habitación sin tocar la puerta.

- ¡¿Qué mamá no te enseño a tocar, maldita sea?! - Le arrojé una almohada y el frunció su entrecejo.

- ¿Qué mierdas quieres? - Preguntó entredientes y cerrando sus ojos con fuerza.

- ¡Oh! - Chasqué mi lengua - Claro, claro. - Cruzé mis brazos y acomodé mi cabello - Pásame mi celular.

El agitó la cabeza negándo y me miró incrédulo.

- ¿Qué? - Elevé una ceja, mientras decía aquellom

- Es..., ¿es enserio, Finn? - Se cruzó de brazos.

- Dah..., ¿Me ves cara de que estoy bromeando? - Alcé ambas cejas, dándole una mirada sería.

- ¡Vete al demonio, Finn! - Salió de mi habitación dando un fuerte portazo.

- ¡Alguien esta en sus días! - Grité riendo.

- ¡Jódete, maldita sea! - Reí a carcajadas.

Me puse de pie y tomé mi teléfono. Abrí instagram mientras me arrojabá a mi cama.

- Haber... - Mordí mi labio inferior.

Oprimí el botón de iniciar un live y sonreí a la camara.

- Hey, chicos - Saludé alegre.

Sadie

- ¡Maldita sea, Finn! - Exclamé furiosa - ¡Contesta por un carajo!

Primer tono...
Segundo tono...
Nada...

- ¡Hijo de su...! - Negué varias veces - No, no. Su madre no tiene la culpa de que tenga un hijo tan idiota.

Primero tono...
Segundo tono...
Tercer tono...
Contestó.

- ¡Al fin! - Exclamé - ¿Por qué mierda no contestabas, piernas de popote?

- Wow..., Sadie, ¿Así es como saludas a mis fans?

- Aguarda. ¿Qué? - Fruncí mi ceño al no entender.

- Estoy en un live, princesita Ariel

- Oh... - Colgué.

Estúpida.
Estúpida.
Estúpida.

Abrí el live de Finn.

- Es encerio, chicos - Rió y hizo una pausa - Ella es muy...ruda. No me deja respirar

Espero y no estes hablando de mí,Wolfhard.

Lo envié y el automaticamente lo leyó y sonrió.

- ¡Hola, novia!

No, no, no. Me debes explicaciones, Finn Wolfhard Jolivet.

- ¡Ja! - Señaló la pantalla - Realmente Jolivet no cuenta.

Lo cuenta para mí.

- Claro, claro.

Me uní a su live y sonreí a la camara.

- ¡Hola! - Saludé.

- ¿Para qué soy bueno, pricesita Ariel? - Dijo divertido.

A mí no me causa gracia, en lo más mínimo.

Love By conтracт - FADIE.  (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora