—¡Eso es difícil de creer!—Andrew dijo después de que Camila le contó cómo había conocido a Lauren.
—Lo sé, ¡pero al final toda esta locura me hizo conocer al amor de mi vida!
—¿Y te rendirás tan fácilmente?
—No puedo forzar nada, te lo dije, traté de explicarle varias veces lo que sucedió, y luego ella fue y pidió una orden de restricción.
—Pero si ella es el amor de tu vida, ¿deberías seguir intentándolo, o quieres dentro de unos años, mirar atrás y arrepentirte de no haberlo intentado más?
Camila escuchaba atentamente.
—Tienes una hermosa familia, si dices que no la traicionaste, haz que te crea, si nada sale bien, al menos nunca llevarás el peso de nunca haberlo intentado. Camila, el no ya lo tienes! ¿Qué más puede salir mal?
—¿Ir a la cárcel?
—No conozco a Lauren personalmente, pero por todo lo que me dijiste, ¡no creo que ella te hiciera eso a ti!
—Tienes razón...—dijo Camila mientras tomaba un sorbo de la botella.—O tal vez estoy tan borracha que creo que tienes razón.
—Solo sé que si tuviera una historia como esa con alguien, no la dejaría terminar por un malentendido.
—¡Tengo una idea! Iré allí y...—Camila decía mientras se levantaba.
—Wow, no irás a ninguna parte, ¿estás loca? ¡Si te presentas así, tal vez ella llame a la policía!—Dijo Andrew, sosteniéndola.
—Extraño a mis hijas, —Camila dijo, empezando a llorar. —Extraño a Lauren, extraño despertarme y mirarla, extraño dejar que mis cosas se organicen milimétricamente, extraño a nuestro perro...
—Está bien,—dijo Andrew, abrazando su cabeza contra su hombro. —Puedes llorar.
—La echo de menos cuando voy a casa desde el trabajo, tomo todo lo que dejo en el camino y me quejo. Ella lo hacía todos los días, solía encontrarlo molesto, pero ahora lo extraño.
—Creo que necesitas ir a casa, descansar un poco.—Dijo, sacando la botella de su mano. —Traeré un Uber para ti, ese es mi número, lo anotaré en tu celular, mañana, asegúrate de tener tu auto.
[...]
—¡El fin de semana de mamá está aquí!—Annelise estaba diciendo mientras saltaba sobre la cama de Lauren.
—Anne, vamos a dormir un poco más.—pidió Lauren, acercando a la niña y envolviéndola alrededor de las sábanas.
—¡Mamá, tienes que ayudarme a arreglar mi ropa!
—Solo unos minutos más.
—¡Vamos! ¡Vamos!—Repitió la niña mientras saltaba de nuevo en la cama de su madre.
—¡Vamos, chiquilla!—La mujer dijo levantándose y agarrando a Annelise mientras le hacía cosquillas.
Lauren luego fue a buscar a las otras niñas a sus respectivas habitaciones, llevándolas a la cocina.
—Nada de exagerar con los dulces, de dormir tarde, de...
—¡Ya lo sabemos, madre!—Annelise dijo.
Lauren dejó a las chicas comiendo mientras iba a empacar sus mochilas de ropa.
—¡Está todo listo! —Ella dijo, poniendo las mochilas sobre la mesa. —Camila debe estar aquí a las 9:30. —Dijo mirando su reloj.
Los ojos de las chicas se abrieron de alegría al escuchar el sonido familiar de la bocina del auto de Camila; Lauren las condujo a la puerta.
—Amelie, no olvides tomar tu medicina a tiempo; ¡Anne nada de pellizcar a sus hermanas y Olivia sin comerse la blusa!— Luego sacó la manga de tela de la boca de Olivia. —¡Mamá las quiere!
ESTÁS LEYENDO
The Experiment: It's Not Over Yet [2ª temporada]
Fanfiction¿Cuál es la receta para un "final feliz"? Una casa en la playa? ¿Un perro e hijos? Matrimonio? 13 años pasaron desde el experimento, Lauren y Camila descubrieron que las novelas de la vida real no siempre terminan como a todos les gustaría. El expe...