#6: ¡Hazlo!

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¿Dónde se metieron? Llevó un rato buscando completamente en vano, después de la agradable charla con O'Connor no se me apetece quedarme un minuto más en esta fiesta.

Estoy por darme por vencida cuando recuerdo a un Kyle emocionado con un bowl de nachos con salsa, cuando me metió un nacho ensalzado en la boca alegando que tenía que probarlos, para después mencionar que estaban haciendo luchitas en la piscina y saliera corriendo, abandonándonos. Tendré que agradecerle el hecho de que O'Connor haya osado ponerme un dedo encima, literalmente.

Llego a la piscina y al parecer las luchitas han terminado, así como mí paciencia. Rodeo un poco el rectángulo de agua en busca de Kyle cuando siento algo que me toca el hombro, de repente no siento nada debajo de mis pies y ahora siento que floto, estoy flotando en agua, en la piscina.

Tardo unos segundos en procesar lo que pasó, me quito el empapado cabello del rostro y dirijo mí mirada a la orilla en busca del culpable, cuando veo a Dina Martínez y Rebecca Ivelic, mirándome con una sonrisa de zorra en el rostro, ambas amigas de Amanda, la tercera zorra de la carretilla y estoy segura, la intelectual de esto.

Estoy a punto de desenvolver mí repertorio de insultos repele zorras cuando veo a O'Connor acercarse rápidamente y a ambas alejarse a trompicones con sus ridículos zancos.

¿Es que este tipo me sigue o qué? ¿Por qué rayos aparece en estos momentos?

O'Connor me tiende la mano, esto no hubiera pasado si él no se hubiera metido donde nadie lo llamó ¡es su culpa! ahora las tres reinas me tienen en la mira por qué en sus cabecitas de coco tengo un poco de atención de su amado amargado, si supieran que la atención que me brinda no es para nada la que ellas desean.

Lo veo con cautela, él asiente y se acerca aún más a la orilla facilitándome su mano, la agarro, y jalo de él con ganas. Cae salpicando bastante agua, está totalmente empapado, sus rizos se pegan a su frente mientras gotas los adornan y su rostro muestra contundente molestia, sorpresa y quizá algo de ¿diversión?

- ¡Esto es tu culpa! - gruño para luego dirigirme a la orilla e intentar salir de la piscina.

Siento como algo me eleva, de un momento a otro me encuentro fuera de la piscina siendo llevada hacia la casa, en el hombro de O'Connor.

- Mí culpa - murmura pensativo.

- ¡Suéltame! - chillo. Él me acomoda sobre su hombro con ímpetu, como si fuera un saco de papas, ignorando mis arremetidas contra su espalda.

Desde la posición en la que me encuentro intento mirar alrededor, agradezco que la mayoría se encuentre dentro de la casa, aunque eso no quita lo nerviosa que me pone la forma en que los pocos que se encuentran en el patio observan la escena. Agradezco ir con casi todo mí cabello cubriéndome el rostro, con suerte, nadie me ha reconocido. Tampoco es que sea muy conocida.

#...#

Dejo que me lleve por temor a hacer más grande el espectáculo, hasta que siento como entramos a un lugar y se cierra una puerta, O'Connor me baja lentamente, dejándonos cara a cara.

- ¡¿Que mierda fue eso?! - le espeto acomodándome la mojada ropa.

-Esa boca - dice en tono de advertencia, después de todo lo que paso y ¿él se preocupa de cómo hablo?

- ¿Y tú quién carajos eres para decirme como hablar?

- ¿Estás esperando que te calle con un beso o qué? - dice notablemente irritado.

Grito exasperada mientras me alejo de él y me llevo las manos a la cabeza, me saca de quicio, este tipo lleva mi pasmo a niveles cada vez más altos con cada encuentro, es sin duda el ser más desesperante e incompresible con el que me he topado.

Tu Existencia Complica La Mia©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora