Wolves / Derek Hale《 completa en español✔︎ 》

10 | Cuarenta en Beacon Hills

Casi todos los del penúltimo grado estábamos en la escuela un sábado para hacer unas pruebas importantes que debíamos hacer. Lo bueno es que la escuela estaba sola y podíamos andar por ahí con libertad. Ahora estábamos en la entrada del salón esperando a que los maestros acomodaran todo dentro la clase.

Estoy apoyada en la pared escribiendo por mi teléfono hablando con Derek. Me dijo que fue a visitar a Braeden al hospital y que sólo está "cuidando" su inversión. Dios mío, no puedo más con esto, definitivamente tengo que decirle lo de Braeden. Ella lo está engañando de manera descarada con un beneficio para ella misma, y sé que si le digo, se enojará conmigo por inventar cosas estúpidas como esas porque literalmente no tiene sentido, pero es la verdad. Buscaré el momento indicando.

- ¡Alice! - me gritó Scott por tercera vez. Volteé a verlo rápidamente poniéndome al corriente - te he llamado, ¿estás bien? últimamente estás muy distraída.

- Descuida, son sólo cosas sin sentido- respondí sin importancia - ¿qué me decías?

- Vamos a durar tres horas aquí. Stiles y yo necesitamos contarte algo importante. - me informó - ¿vas a mi casa en la noche?

- Claro. Yo también tengo que contarles algo - les conté. Él asintió y se volteó donde Kira.

Iba a contarles lo de Braeden a Scott y Stiles, son mis mejores amigos y sabrán guardar el secreto. Hasta que Derek lo sepa. Regresé a mi teléfono y le escribí al beta que entraría para hacer la prueba por lo que no contestaría sus mensajes, él sólo me respondió un "de acuerdo, te amo". Suspiré y apagué mi celular sin responderle, no quiero desconcentrarme en la prueba por él sabiendo que está con Braeden.

Todos entramos en fila hacia el escritorio, donde estaba un maestro que nunca ví y la profesora Martin. Pusimos nuestra huella en unos documentos y pusimos nuestros teléfonos en bolsas, tomé mi prueba y me senté al lado de Malia.

- Tienen tres horas para realizar la prueba. Serán veinticinco minutos de matemáticas, treinta minutos de lectura y escritura, y por último otros veinticinco para cultura general - nos informó el maestro extraño - ya pueden empezar.

Puso las tres horas en el cronómetro. Tomé el lápiz de mi chaqueta y abrí la prueba empezando a contestar. Volteé a mi derecha encontrado a Stiles un puesto al lado de Malia, él tenía dos lápices en cada mano contestando. No pude evitar sonreír un poco por la técnica de mi amigo. Volví a lo mío. "¿Qué fórmula se debe usar para hallar el área de un triángulo?". Estas preguntas parecen de primaria de segundo grado, ¿es enserio? contesté en mi hoja de respuestas.

Pasaron unos diez minutos de puro silencio en aquél salón, sólo veía que Malia miraba a todos lados con cara de preocupación ya que no entendía NADA de matemáticas. Giré mi cabeza rápidamente hacia detrás mío al escuchar un estruendo, una chica se había caído de su silla sin razón.

- ¡Sydney! - gritó la maestra Martin acercándose corriendo y ayudándola a levantarse - ¿estás bien? ¿no te pasó nada?

- No, estoy bien... - murmuró sonriendo un poco. La maestra le miró la muñeca y tenía una extraña marca morada - no sabía que tenía eso ahí...

La maestra Martin la dejó y salió caminando del salón dejándonos solos con el maestro extraño. Pasaron varios segundos y escuchamos gritos afuera de la clase, todos nos asomamos por la puerta viendo a la madre de mi amiga cerrando las puertas.- entren al salón y no salgan. - nos advirtió. Nosotros regresamos a nuestro salón.

El maestro nos dijo que dejáramos la prueba ahí. Ví que Scott estaba parado en la puerta mirando a la nada, sé que estaba escuchando a la maestra Martin, por lo que me acerqué a él.