Wolves / Derek Hale《 completa en español✔︎ 》

9 | Final | Juntos para siempre

Dos días después

- ¡Derek! - grité alto entrando al loft casi corriendo

El hombre lobo se sobresaltó en el sofá al oírme y me miró confundido, me acerqué a él y me senté a su lado mirándolo con una sonrisa. Él frunció el ceño.

- ¿Porqué no me dijiste irías conmigo a LA? - pregunté emocionada. Él rodó los ojos con una sonrisa - encontré el recibo de que habías comprado un apartamento allá con dos habitaciones.

- Se suponía que era una sorpresa, amor... - murmuró mirándome - pero bueno, ya lo descubriste

- Eso es increíble, ¿sabes el montón de cosas que podríamos hacer juntos en Los Ángeles? - pregunté risueña. Lo abracé por el cuello - me gusta mucho que lo hagas, enserio quiero ir a la universidad estatal de California

- ¿Creías que te dejaría ir sola a Los Ángeles? estás loca. - me dijo mirándome

Besé sus labios dulcemente. - ¿vamos a pedir comida o preparo la cena? - pregunté.

- Si quieres pide algo, no debes cocinar amor. - accedió, asentí. Me levanté del sofá y caminé a la cama para tomar mi teléfono - pero que no sea sushi, el otro día casi me ahogo.

Reí. Marqué el número del domicilio, ya que a ambos nos gusta mucho. Derek se fue para la planta de arriba y no sé qué hará. Me contestaron el teléfono y la pedí de pollo con jamón, me dijeron que en cinco minutos estaría aquí. Colgué.

Esperé hasta que tocaron la puerta del loft y la abrí un poco, tomé el pedido y agradecí cerrando la puerta detrás mío. Dejé la caja de pizza, Derek está tardando por lo que decidí buscarlo. Subí las escaleras llegando a la segunda planta y no se oía casi nada. Caminé en dirección al baño.

- ¿Derek? - lo llamé entrando. Fue entonces cuando lo ví saliendo de la ducha con una toalla en su cintura. Literalmente me quedé paralizada.

- Uh, eh... Lo siento. - me disculpé apenada. Pude un mechón de mi pelo en mi oreja - mejor te esperaré afuera.

Salí como un rayo. Me apoyé en la pared de al lado tratando de tranquilizarme, bajé las escaleras sentándome. Recogí mi pelo en una coleta por tener calor. Derek y yo no hemos tenido sexo desde hace seis meses, realmente se me hace difícil verlo al menos sin camiseta o algo así. Perdí esa pequeña confianza en nuestra relación.

Al poco tiempo escuché sus pasos por las escaleras, traté de verme bien sonriéndole. Se sentó en el sofá al frente mío mientras un pequeño mesón nos separaba. Yo estaba sentada en una silla. Comenzamos a comer la pizza. Mientras lo hacía miré mi mano recordando el anillo y el matrimonio. Carajo, lo había olvidado por completo.

- Derek... - él hizo un sonido con la boca mirándome - tengo que confesarte algo que encontré.

- Dime. - dijo dispuesto a escucharme. Dejó su pedazo de pizza en la caja y me miró atento. Esa mirada me desconcertó un poco