Capítulo 8

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—¿Es HanBin?— preguntó MiYeon, obviamente escuchándolo a través del celular.

—Sí, es HanBin— respondí, por lo que él bajó el periódico para ver con quién estaba hablando —Está siendo... HanBin.

Le sonreí, caminé por el costado de la isleta para besarlo. Me dio una manotazo con el periódico e hizo un puchero.

—Eso es por decir "Está siendo... HanBin".

Me reí, sin soltar el celular de mi oreja.

—Gracias de nuevo, MiYeon. Voy a comentarlo con él y te haré saber si le parece bien.

Al darse cuenta de que estaba hablando con mi ex-esposa, HanBin levantó una ceja y se dirigió a la cocina. Inspeccionó los pescados y el tubo de especias tailandesas, entonces me miró, más que alarmado. Luego gritó:

—MiYeon, que Dios me ayude, ¡está intentando cocinar!

—Ignóralo— le dije, sabiendo que lo había escuchado. Y entonces le seguí a la cocina —Cocino a veces.

HanBin me tendió la mano, y de mala gana, le pasé el celular. Mientras tanto, separé los pescados y los sequé con una toalla de papel, HanBin habló con MiYeon. Le dio un comentario acerca de mis habilidades culinarias y la oí reír a través del celular. Toda la conversación duró cerca de treinta segundos. Y cuando él deslizó mi celular en el mostrador, suspiró.

—Ella me ama.

Rodé los ojos.

—Bueno, entonces puede tomar un turno.

—Me dijo que te dijera que deberías cocinar más a menudo.

—Por supuesto que lo hizo.

—A pesar de que estas cocinando pescado, cuando claramente yo te pedí pollo.

—¡Claro que no!

—Bueno, eso quería— dijo —Y también me dijo que debes de dejar de verte tan condenadamente sexy en jeans sin calcetines— dijo, mirando mis pies.

Le sonreí.

—Claro. Ella dijo eso.

HanBin asintió sin pudor.

—También dijo que eres muy afortunado de tener a alguien tan impresionante como yo.

—Oh, sí, todos lo sabemos— dije rotundamente.

—Entonces luego dijo que deberías de dejar lo que estás haciendo y caer de rodillas en la cocina para hacerme una mamada.

Me reí de él.

—¿Estás seguro de que dijo eso?— le pregunté —Porque no fue una conversación muy larga, y eso es apenas un rompehielos para conversaciones cortas con ex-esposas.

—Sí, eso es lo que dijo— dijo HanBin muy serio —O algo así, la verdad es que estaba teniendo problemas para concentrarme. Me distraje con tus pies desnudos.

Me lavé las manos en el fregadero, me sequé con el paño de cocina y me acerqué hasta estar delante de él. Deslicé mi mano por su cuello, su pecho, más abajo en el estómago e incluso más, con lentitud, abrí el botón de sus pantalones de vestir con una sola mano.

Sonrió contra mis labios y luego asintió.

—Hazlo— gimió.

Poco a poco bajé hasta hacer de rodillas y, allí mismo, en la cocina, bajé sus pantalones y liberé su miembro semi duro de su bóxer. Entonces lo tomé en mi boca, chupé su pene hasta que estuvo lleno de vida.

UP ❀ Double B [iKON]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora