Cuando abrió la puerta el departamento estaba a oscuras.
Suspiró, pasando entre los muebles para poder llegar a su habitación. Eso, hasta que un relámpago iluminó la estancia y a un Jimin durmiente en el sofá. Una taza de café fría sobre la mesita de centro.
Iba a pasar de largo, pero le pesó mas la consciencia.
— Jimin-ah... — llamó, moviéndolo desde el hombro. El chico abrió los ojos, reaccionando en cuanto sus miradas se encontraron.
— Yoongi, ¿Acabas de llegar? ¿Dónde estabas? Baekhyun me llamó, dijo que te ausentaste. Estábamos preocupados, nunca habías faltado al trabajo — se precipitó él, toqueteando en su cuerpo para verificar estuviera bien.
— Estoy bien, lo siento — dijo únicamente, desviando la mirada.
Jimin apretó los labios y lo hizo sentarse en la mesita de centro, frente a él y le echó la manta que antes tenía él encima cuando notó lo frío que estaba.
— Sobre lo que pasó hoy — hizo una pausa, y al ver que Yoongi no se iba, continuó —, ¿Qué tanto es cierto?
El rubio se quedó callado bastantes segundos, y cuando creyó que no hablaría, un suspiro pesado le avisó que debía seguir paciente y callado.
— La parte donde Hoseok y yo nos enredamos lo es — admitió en voz baja, temiendo ver la reacción de su mejor amigo.
— No sabía que tú... que te gustaban los chicos — la voz de Jimin seguía con tanto tacto, como si temiera lastimarlo. Y eso era algo que le hacía tener mas ganas de llorar.
— Sólo él lo sabía — susurró, abrazándose con la manta.
— Yoonnie, no voy a juzgarte. Sólo... el tema de lo de Taehyung sí me deja confundido. Cómo llegaron a esto. El escándalo en la escuela fue demasiado hasta para mí.
La lluvia comenzó a repiquetear contra las ventanas más intensamente. El rubio se removió, encogiéndose de hombros. No quería hablar de algo que le dolía todavía.
— Uhm, yo no... no sabía eso — susurró con voz ahogada.
Entonces Jimin lo comprendió, y abrió la boca con sorpresa antes de atraerlo a él cuando Yoongi se rompió y comenzó a sollozar contra su pecho.
— Oh, Yoonnie — susurró, acariciando su cabello —, estás enamorado de él, ¿no?
El suave llanto de Min lo estremeció. Lo abrazó más, enfadado con Hoseok por no haber hablado con él. Y tal vez, Jimin también tenía parte de culpa por haber obviado los detalles de su amigo, asumiendo que estaba bien como estaba.
Yoongi lloró hasta quedarse dormido. Ambos despertaron a la mañana siguiente a causa de la alarma en el teléfono de Jimin. Se miraron en silencio y fueron a sus respectivos cuartos.
Encontró su teléfono en el suelo junto a la cama, intentó encenderlo pero no tenia batería así que lo dejó cargando mientras iba a ducharse.
Al salir del baño y luego de secarse sacó su mochila y apuró las tareas.
Cuando encendió el teléfono llegaron las notificaciones de mensajes y llamadas. Hoseok le había enviado algunos textos.
Imbécil
Yoongi, siento mucho lo que ocurrió.
05:45Lamento haberlo ocultado.
17:34Hablemos, ¿si?
15:56Por favor, llámame cuando te sientas listo para hablar.
20:09
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If You
FanfictionMin Yoongi sólo quería tener una vida normal; pero eso no estaba escrito. Ni tampoco estaba escrito que él pudiera ser sencillamente feliz. No. A veces, sólo estaba escrito, y los "Si yo" "Si tú", no eran válidos. A veces sólo quedaba levantarse...