𝘛𝘩𝘦 𝘉𝘳𝘰𝘰𝘬𝘭𝘺𝘯 𝘉𝘰𝘺 -𝘏𝘢𝘳𝘥𝘻𝘦𝘭𝘭𝘰-

«Capitulo 56»

Ben estaba en el escritorio, leía unas cartas, Joe agarró la primera.

Querido Ben,
¿Será mi imaginación? Todas las sonrisas falsas, hay algo malo.
Todo el mundo dice que está todo bien, dame un trago o cinco.
Bailabamos, todo era perfecto, siempre estábamos cantando hasta quedarnos sin voz.
Mierda, seguro te extraño.

Blake.

Agarró la segunda.

Querido Ben,
No es triste cuando extrañas escuchar la puerta abrirse? Te das vuelta y ahí estás, con una gran sonrisa. ¿Porque terminamos así? Yo sé.
Porque lo prefieres a Joe, prometí cambiar... Si te quedarás conmigo. Extrañaré todas esas conversaciones y esas noches con alcohol donde siempre reíamos a carcajadas.

Connor.

Y así, con las demás.

Querido Ben,
Dices que soy una amiga, pero mentes confusas y miradas ciegas. ¿Dónde quedamos? Siento que no te hice feliz, pero al verte con Joe sonríes y eso me pone contenta, porque te veo sonreír con la persona que amas.
Rompí las puertas para robarlo todo, escapé con todos nuestros momentos robados. Llámame ladrona, pero yo me iré con estos momentos que tuve contigo.

Winona.

Hasta que vio una, era dirigida para él.

Querido Joe,
Nos conocimos hace mucho, en mi peor momento fuiste a consolarme, ¿Eso no es amistad? Te lleve tan lejos, me daba miedo dejarte solo.
Te atraparía si caías, dime ahora como se siente estar tan alto pero tan lejos para abrazarme. Recuerda que yo te puse arriba, tu nombre en el cielo.
Pensé que podrías vivir sin mí.

Ximena.

La siguiente, era para él.

Querido Joe,
Y voy al colegio, me siento a tu lado y no estás, no me concentro si no estás.
Quisiera saber si estás bien, me dijiste que estabas bien mientras llorabas. Yo dejaría todo por ti, como siempre lo hago, y ahora solo bailo con tu fantasma, quisiera cambiarlo con el shot de la verdad, pero solo puedo bailar con tu fantasma.

Joe Keery.

Miró a Ben por unos segundos y apoyó su mano en el hombro del mayor
- ¿Todo bien? - preguntó el pelirrojo, Hardy solo asintió tratando de no sollozar
- se que los extrañas, al igual que yo - consoló abrazándolo, Ben correspondió
- están en mi sangre, al igual que tú...y toma - le entregó una carta.

Querido Joe,
Siento que las paredes se cierran, a veces me siento que no estoy dando todo por tí. Dejaría de hacer lo que estoy haciendo, con tal de ayudarte y protegerte, eres mi amor, mi pequeño, relativamente mi todo.
Estás en mi sangre, así como lo está Blake, no te olvidaré nunca.
Quiero estar presente hasta la muerte, quiero que nunca nos separemos.
Te prometo muchas cosas, y la promesa que siempre voy a tener en cuenta es que siempre voy a dar todo y me voy a sacrificar por ti. No importa cuan difícil sea, yo haré todo lo posible para estar a tu lado.

Ben.

Joe lo miró con los ojos cristalizados y lo abrazó tan fuerte como pudo
- Yo también prometo estar a tu lado y sacrificarme, lo prometo Ben - dijo después, para partir en llanto.
Ben lo abrazó más fuerte y también comenzó a llorar.
Ambos se vieron y se besaron, queriendo que ese beso fuera eterno, como lo sería su amor.

Su amor sería eterno para siempre y no les importaría mostrarle al mundo.

No les importaría la opinión de los demás, al final, son ellos mismos.

- Gracias por hacer de este, el mejor viaje - agradeció el mayor y lo alzó, para depositarlo en la cama con delicadeza.
Finalmente, se quedaron acostados y abrazados, Joe estaba tan acurrucado en el pecho de Ben. Y Ben tan acurrucado con la barbilla apoyada en el cabello de Joe.
No había duda de que se amaban demasiado.
- te amo tres millones - habló Joe
- yo también te amo tres millones - contestó Ben.