Malos Consejos

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- Ábreme la puta puerta

- No te voy a abrir ni mierda, largate – reí.

- Me cago en tu vida, Oliver. ¡Ábreme! - volvió a golpear la puerta y yo puse mi mano en la perilla para abrirla.

- Quiero dormir, vete – traté de esconder mi risa pero en mi voz se notaba.

- Ya escuché que te estas riendo pendejo, me estoy bañando aquí. ¡Ábreme imbécil! - golpeó la puerta más fuerte y sin poder torturarlo más le abrí . Se había mojado de pies a cabeza por la lluvia y sostenía un cuaderno sobre su cabeza como si eso lo protegiera en lo más mínimo. Entró a paso apurado a la casa dejando charcos de agua con cada pisada.

- Mierda, tú vas a secar todo eso – cerré la puerta apenas cruzó por ella y fui a la lavandería por una toalla seca.

- Jodete, eso pasa por no dejarme entrar – los dos reímos y yo corrí hacia el cuarto antes de que se sentara en el sillón y mojara absolutamente todo. También saqué del armario de limpieza el trapeador con su cubeta para secar los charcos de agua que estaba dejando.

- Jake, no jodas. Párate de la silla, vas a malograrla – le tiré la toalla y la cogió en el aire antes de pararse. Comencé a secar el agua del piso.

- Line me dijo que estaba a dos cuadras con Fran, así que apurate en limpiar – me dijo mientras se secaba el cabello.

- No molestes, termina de limpiar tú – le entregué el trapeador, arqueando una ceja.

- Asu... - se quejó mientras lo agarraba y dejaba la toalla en la barra de la cocina - ¿Para eso vengo?

- ¿Para qué jodes? - me reí y me dirigí a la refrigeradora para sacar unas latas de cerveza heladas. Saqué 2 para cada uno y los dejé en la barra.

- ¿Arriba hay más? - me preguntó Jake mientras exprimía el agua del trapeador en la cubeta.

- Sí, pero no de esta marca.

Arreglamos todo en la sala y subimos a mi cuarto a que se cambie de ropa, le preste un polo y unos pantalones mientras esperábamos a que secará su ropa.

No demoraron mucho en llegar los chicos y en pocos segundos ya estaban todos en mi cuarto tomando sus cervezas. Nos distrajimos un rato conversando de trivialidades y jugando en el Play Station.

- Pásame otra cerveza – Line le ordenó a Jake, él cual estaba más cerca del mini frigde.

- Ya perdiste – me gritó Fran al notar que me había equivocado de ruta en el juego.

- No le digas – Jake comentó y los 4 reímos.

- Son unos idiotas – les dije y en el juego me adelanté a Fran pasando la linea de llegada – ya no confían en mí – dejé el mando en la cama y tomé un sorbo de mi cerveza.

- Aggh – gruño Fran – siempre haces lo mismo.

- Nunca me podrás ganar – dije orgulloso.

- Sí, solo admítelo. Siempre que juegan terminas perdiendo – le dijo Line mientras prendía un cigarrillo.

- No, no lo acepto. Otra partida

- Ya llevamos 3

- Sí, - Jake se acercó a él y le tocó el hombro - ya cánsate – Line, Jake, y yo nos reímos ante su comentario.

Alguien Que ConozcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora