Sudadera [y o o n m i n]

D O S

Park JiMin, 13 años.

Eran las 7:26 de un miércoles por la mañana, JiMin se estaba arreglando para ir a la escuela.

Estaba haciendo calor, por lo que se puso una playera sin mangas y encima la camisa de manga corta de su escuela. Su pantalón se había roto, por lo que optó por ponerse uno de mezclilla. Pensó en las palabras que diría cuando le preguntaran por qué no traía el uniforme completo.

[...]

Después de la serie de preguntas de por qué no llevaba el pantalón de la escuela lo dejaron entrar. Dió un bufido y entró a sus respectivas clases.

[...]

Mientras estaba en clase, JiMin empezó a sentir frío, se maldijo por lo bajo, no había llevado su maldito suéter.

[...]

Era ya la hora de la salida, JiMin tenía muchísimo frío, tenía que volver a casa en autobús.

Estaba en la parada mientras estaba tiritando de frío, cuando llegó su bus subió y se arrinconó en una esquina buscando calor.

[...]

Después de pasar una parada, subió un chico, traía una sudadera negra, se veía realmente acogedora.

Por un momento sintió envidia del muchacho, estaba envuelto en esa calientita sudadera y el ahí, pasando frío.

Lo miro por mucho tiempo. Se mordió el labio y pensó en preguntarle sí podría prestarle su sudadera, rápidamente descartó esa idea y volteó hacia otro lado.

Empezó a pensar en llegar a su casa y envolverse en sus mantitas, en eso, un estornudo por parte suya interrumpió sus pensamientos.

Sintió una mirada sobre sí y vió de reojo que el muchacho lo observaba, le restó importancia y se dedicó a ver por la ventana todo el camino.

[...]

No alcanzó a ver cuándo fue que el chico bajó, y en cuanto volteó a ver el asiento, vió la sudadera.

La observó un rato, pensando en sí hacerlo o no.

Se veía tan calientita...

El chico no iba a regresar al camión por la sudadera...

Con un pequeño suspiro, JiMin tomó la sudadera y se la puso, se sentía muy reconfortante, era caliente y cómoda, realmente había tenido suerte.