Bajo mi techo // Under my roof [COMPLETA]

Capítulo 40: Extra (+18)

* Una vez más, es irrelevante para avanzar en la historia

* Siéntanse libres de ignorar completamente el capítulo si lo prefieren.

Arthit POV

Lo empujé ligeramente contra la puerta cerrada del dormitorio, y cuando estaba a punto de abrir la boca para decir algo, estrellé mis labios contra él, primero para callarlo antes de que dijera algo estúpido otra vez haciendo que simplemente aumentara mas mi ira hacia él y en segundo lugar porque estaba casi desesperado por sentir sus labios contra los míos. Es realmente raro para mí sentirme hervir de celos, y tampoco soy tan violentamente apasionado, pero de alguna manera Kong logra sacar lo mejor y lo peor de mí.

Mientras rasgaba sus labios, hundí ambas manos en lo profundo de su cabello para presionar su cara lo más cerca posible de la mía. Él, a su vez, pasó los brazos alrededor de mi cintura y tiró de mi cuerpo contra él mientras inclinaba nuestras cabezas, para responder a mí con la misma fiereza, ambas lenguas luchando por la dominación. Pero solo unos momentos más tarde, gruñí por lo bajo con frustración mientras enroscaba mis dedos en su cabello y echaba su cabeza hacia atrás, arrebatando mis labios de él mientras dejé que mi boca viajará a través de su mandíbula, por un lado de su cuello, alcanzando su clavícula con impaciencia. Lamiéndolo y chupándolo cuando me di cuenta de que era la primera vez que había probado su piel.

Y ahora que podía probar el almizcle y la salinidad que era tan exclusiva de Kong, no quería dejar su piel. Sé que probablemente iba a dejar una marca de aspecto bastante enojado, pero ese era el punto. Ya es hora de que sea obvio para el mundo que Kong estará fuera del mercado para siempre.

Mientras seguía perdiendo mis sentidos, abrumado por su sabor y olor, él puso sus manos debajo de mi camiseta, amasando los músculos de mi espalda. Apenas había dejado de chuparlo y moví mi cabeza ligeramente para admirar mi obra antes de que él me levantara la camiseta y la arrojara lejos, golpeando sus labios contra los míos y lentamente caminando hacia la cama.

Nos detuvimos brevemente cuando la parte posterior de mis piernas golpeó la cama, separándonos más de una pulgada por primera vez desde que lo había arrastrado al dormitorio. Me sonrió con una mirada que me asustó, y al mismo tiempo también me entusiasmó. Y antes de que me diera cuenta, él nos había tirado a ambos en la cama y colocándose sobre mí.

—P' si hubiera sabido antes que los celos te ponen cachondo, lo habría intentado hace mucho tiempo.

—¿Quién dice que estoy celoso? ¿O cachondo?

—Lo que sea que estés en este momento, me gusta mucho.

Bajó la cabeza una vez más y mordisqueó mis labios mientras sus manos empezaban a vagar sobre mi pecho desnudo, las yemas de sus dedos enviando oleadas de hormigueos a todas partes arrastrándose por mi piel sobrecalentada. Gemí contra su boca cuando él comenzó a chupar ligeramente mis pezones, mis manos torpemente se movían contra los botones de su camisa. Desesperadamente queriendo sentirlo contra mí sin las torpes barreras de nuestra ropa. Suavemente puso sus manos sobre las mías, estabilizandose antes de alejarse lo suficiente como para quitarse la molesta camiseta. Pero antes de que pudiera venir a reclamar mi boca otra vez, moví mis manos hacia el dobladillo de sus pantalones, moviendo nerviosamente el botón. Una vez más atrapó mi muñeca, deteniéndome en mis esfuerzos por exponerlo más.

—P' estas... ¿estás seguro?

—¿Por qué? ¿Tu no?

—Por supuesto que lo estoy. Quiero ha... contigo.

—Sí, yo también.

Soltó mis manos y me miró mientras yo desataba su cremallera y le bajaba los pantalones junto con los boxers. Ajustó su posición para empujarlos y se acercó a la mesita de noche para sacar una botella de lubricante y un condón.