OɴePιece ° OɴeSнoтѕ~ 𝐄𝐧 𝐜𝐮𝐫𝐬𝐨

7- Yo estoy a cargo [Smoker x Lectora +18]

Smoker x lectora (t/n) (+18)

Todos los días viene al café a la misma hora.
Siempre pide lo mismo, un gran espresso doble y un sándwich. Se sienta en el mismo lugar afuera en la terraza. Es la única manera que pueda estar aquí y fumar mientras consume.

Claro que hemos recibido quejas de diferentes clientes porque tiene la manía de fumar hasta dos puros en vez de uno como una persona normal.

A mi jefe, Franky, le da lo mismo y siempre les responde. «Si no te gusta te vas»... Me da risa cada vez que veo esos enfrentamientos entre clientes quejosos y mi jefe.
Él es normalmente muy relajado, siempre anda en camisa con estampado hawaiano y bañador tipo zunga.
Me agrada mucho, y me trata bien. Me dio trabajo cuando nadie más lo hizo. Él me respetó como soy desde el principio y cinco años después soy la encargada de uno de sus locales.

Vengo de un lugar muy pobre, no tuve padres y salí adelante sola. Estuve mucho tiempo viviendo en la calle por lo que nadie me dice cómo es la vida real. Toda mi vida me he hecho cargo de todo sola, dependiendo únicamente de mi misma.

Hoy ha sido un día tranquilo hasta que otro cliente reclama por la misma razón.

Esta vez mi jefe no está así que me toca a mí poner la cara a quien tiene una pinta de gamberro bueno para nada, ya me imaginaba cómo iba a ser .

—¡Oye mujer! ¿que no deberían prohibir a tipos desubicados como este en lugares públicos?

—Señor, él es un cliente regular y está al aire libre, puede hacerlo si quiere.

—Pero me molesta. Ve y sácalo.

—Nuestra política de empresa prohíbe ese tipo acciones con clientes —le informo con mi paciencia al límite.

—Pero que repuesta más estúpida, ¿qué más puedo esperar? si con esas tetas dudo que tengas cerebro—.Intento mantener la calma y no responder una barbaridad.

—Con todo respeto señor, si gusta puede entrar y consumir dentro del local.

—¡Ja!Tu no me vas a decir que hacer perra—.Ya me estoy empezando a cabrear —...Aunque si me das un servicio especial adentro, con gusto te hago caso —me dice sonriendo, el maldito.

Ya está, es todo. En ese mismo momento siento movimiento a mi lado pero lo ignoro, yo acerco una silla y pongo mi pierna apoyada en ella, mientras me inclino al tipo.
—A quien vienes a tratar así , puto de mierda? ¿Eh?
¿Que creer que soy tu perra o algo así? Que te quede claro ¡¡¡Soy mi propia perra y si no quieres estar en este puto lugar , te vas por donde se te canten los cojones!!! —vocifero con mi tono más pemdenciero que tengo, sin darme cuenta veo que junto a mi mano sujetando su camisa está la mano de otro cliente... Miro hacia arriba y veo que me observa con una expresión de incredulidad.

La gente alrededor empieza a aplaudir y reir.
Él tipo, aterrorizado, se va corriendo y tropezando en el camino.
Respiro profundo y arreglo mi ropa mientras le indico a la camarera que ordene y limpie esa mesa.

—Gracias por la ayuda, pero me las arreglo sola.

—Por lo visto, no tendría ni que haberme acercado —me dice sonriendo de lado aún con sus puros humeantes.

—Por cierto mi nombre es Smoker —dice estirando una mano.

—Si ,lo se —le digo ignorando su gesto, pero con una sonrisa le guiño un ojo y me dirijo al interior del café, dejándolo con expresión divertida mientras se cruza de brazos.

Me toca hacer arqueo en fondos este día así que aún saco cuentas cuando ya todos se han ido, ha sido una larga jornada pero productiva, me alegra que nos esté yendo bien .
El jefe estará orgulloso de lo bien que le va al café, en una ocasión me ha dicho que si abría otro yo podría tener completo control sobre él, como comienzo de una franquicia.