•|Siempre para ti|•

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El colegio había acabado y las vacaciones se hacían presentes, pero para Luna y Matteo también se hizo presente presión de tomar una decisión respecto a su vida. Elegir una carrera universitaria, ser patinadores profesionales, cantantes, bailarines, etc.

Dado esto, el padre de Matteo había vuelto a insistir con que su hijo asistiera a oxford. Matteo tenia muy clara la repuesta; No. Sin embargo, Angelo no era el tipo de persona a la que le respondías de esta manera tan fácilmente.

[…]

- ¡Chico fresa! - exclamó Luna llegando al encuentro con su Matteo, pues este la había citado en el parque para decirle algo importante. Al acercacarse a él plantó un beso en sus labios en forma de saludo.

- Chica delivery.- sonrió un poco él em medio del beso.

- ¿Que onda? ¿Que era eso tan importante que me querías decir?.- dijo ella al separarse del beso, sentándose con Matteo en una banca.

- Yo... - suspiró el italiano tomando la mano de la chica. Necesitaba tanto su apoyo, en este momento no sabía que hacer, se sentía hundido.

- Matt... Estás asustándome. ¿Que pasa? Sabes que puedes confiarmelo todo. - Luna acariciaba sus nudillos al tener sus manos entrelazadas y con la mano libre brindaba caricias en sus rulos.

- Hablé con mi padre respecto a oxford.- soltó finalmente.

- Vaya, no esperaba eso. - cambiaron de posición a modo que quedaran frente a frente. - ¿Y que pasó, amor? ¿Cómo te fue?.

- Horrible.- suspiró pesadamente Matteo. - Le dije que no quería ir allá, mi decisión está tomada desde hace más de un año. Al principio pareció entenderlo, pero luego... - mordió su labio nervioso. - Me dijo que si no quería ir, estaba perfecto, pero entonces me olvidara que tenía papá.

- ¿Qué? Matteo... Ay chico fresa. - Luna estaba tardando en procesar todo, mientras lo hacia, abrazó al italiano.

- Luna... Me dolió, me dolió demasiado. ¿Con que derecho lo dice? ¡Se olvido de mi desde que mamá falleció y ahora viene a decirme esto! - el chico no pudo más y comenzó a llorar del coraje en brazos de su chica. - Ah, y eso no es todo. Canceló mi tarjeta de crédito y el contrato del departamento donde estaba viviendo. Literalmente me puso en la calle, no tengo donde quedarme ni dinero suficiente para sobrevivir. - Matteo se separó del abrazo para poder mirar a los ojos a su novia.- Eres lo único que me queda, Luna.

Ella estaba en shock, no podía creer el nivel de maldad de una persona hacia su propio hijo.

- Matteo... - musitó acariciando las mejillas del chico. - No te preocupes por nada, ni por él, ni por el dinero, ni por tu departamento. Vendrás a casa conmigo, la mansión es enorme y es mía, así que te mudaras ahí, ¿si?. Conseguiremos un trabajo de verano, con el podremos pagar lo que necesites, aunque realmente no será nada pues estarás viviendo conmigo, por mis papás no te preocupes, ya veremos como los convencemos.- Luna miraba directo a los ojos de su chico, quería darle paz en un momento difícil como éste.- No dejaré que sufras, Matteo. Voy a hacer todo para ayudarte y verte feliz, no quiero verte triste ni mal, vamos a salir adelante juntos.

Matteo sonrió ampliamente, bendito sea el momento en el que conoció a Luna. Si no estuviesen juntos, estaría perdido. Estaría totalmente derrumbado.

- Gracias por todo, Amore mío.- musitó Matteo antes de fundirse en un abrazo cálido.

[…]

Luna había llamado a su mamá para decirle que Matteo iría a cenar con ellos esta tarde, pues ahí les darían la noticia de la mudanza.

- Es un gusto que nos visites, Matteo. Esta es tu casa cuando gustes venir, eh.

- Muchísimas gracias, Mónica. Yo adoro venir  a probar su comida. - Vaya que literalmente es mi casa. Pensó Matteo antes de responder.

- Puedes venir siempre que mantengan 10 centímetros de distancia.- musitó Miguel celoso y protector.

- ¡Papá! - Lo regañó Luna apenada, sin embargo, tenia que aprovechar este momento para decir lo que tenía que decir.- Eh familia... Yo... Nosotros tenemos una noticia que darles.- sonrió nerviosa. - Matteo... Matteo vendrá a vivir con nosotros.

Después de varias explicaciones y una larga plática sobre los cuartos separados y la protección sexual, Miguel y Mónica accedieron.

Más tarde, fueron al ex departamento de Matteo para sacar sus cosas y llevarlas a la mansión. Al estar allá, se dieron cuenta que tomaría más tiempo del pensado, así que sólo tomaron lo básico.

Por la noche, estaban muertos. Había sido un largo día, lo único que querían era ponerse pijama y meterse a la cama. Al llegar a la mansión, así lo hicieron, sólo que cuando los padres de Luna estaban dormidos, Matteo se metió al cuarto de Luna para poder dormir junto a su princesa.

Oficialmente, estaban viviendo juntos.

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800 palabras y aún así siento que quedó kk 😃

Talvez haga un OS de la mudanza :3

¿Aún les gustan los One shots Lutteo? :(((( diganme que si :'(

Yo los amo y los seguiré escribiendo (aunque sea cada 999928993 años)

Las amo :3 Gracias por leerme

Fer 🍓🌙❤



One shots lutteoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora