Privacidad. [2/3]

1.2K 63 89
                                    

Parte II de "Cumpleaños"

Luna

A partir de mi fiesta de 18 años las cosas no han parado de mejorar. Es como si antes hubiese estado una nube de lluvia sobre nosotros y ahora se disipó para traernos solo felicidad y buenos momentos.

Desde que vivíamos en México mis padres han deseado tener un negocio propio, para ser más exactos un pequeño restaurante donde la chef principal sea desde luego; mi madre. En los últimos meses papá y mamá con ayuda del abuelo han estado materializando ese sueño para poder llevarlo a cabo, así que han estado algo ocupados siendo futuros grandes empresarios.

Ámbar ganó una beca para estudiar en París como siempre había querido y toda la familia no puede estar más feliz por ella. Ha estado arreglando todo para que su mudanza sea pronta pero no demasiado, ella dice que por supuesto está emocionada por la oportunidad pero desde luego va a extrañarnos demasiado.

Las cosas entre ella y Simón estuvieron algo tensas por un tiempo gracias al tema del cambio de país. Ámbar desde luego quiere que su novio la acompañe, solo que al principio a mi mejor amigo pareció no agradarle del todo la idea. De una forma u otra y gracias a los "trucos" de mi querida prima, logró convencerlo de ir a vivir juntos allá. Su viaje es en tan solo unas cuantas semanas, por lo que últimamente la mansión se ha vuelto un caos en cuanto a personas yendo de aquí para allá y haciendo grandes cantidades de ruido.

Ahora bien, en lo que a mi refiere, he estado en una pequeña crisis debido al tema de mi preparación profesional. Mi familia quiere que asista a la universidad, sin embargo lo que yo quiero es ser patinadora profesional. Me tomó un tiempo descubrirlo pero finalmente lo supe, el patinaje para mi significa más que una diversión o un hobbie.

Cuando se lo comenté a mi familia hubo una pequeña discusión entre nosotros pues tenemos visiones contrarias de mi futuro. Aún estoy algo confundida por saber cuál camino tomar, si debo arriesgarme a seguir de lleno en el patinaje o elegir una carrera universitaria que me agrade y a la vez me permita continuar mi pasión.

Cada vez que mi mente se encarga de abrumarme con todo ese tema de mi futuro siempre tengo algo, o mejor dicho alguien, que me ayuda a poner los pies sobre la tierra, relajarme y distraer mi cabeza por un momento. Esa personita especial es nada más y nada menos que mi Matteo.

Las cosas con él no pueden ir mejor, cada día nos enamoramos más y nos descubrimos poco a poco. Nos apoyamos, nos escuchamos y sobretodo nos amamos con toda la fuerza de nuestro corazón. Hemos tenido varias citas, paseamos por las calles, vamos a patinar, salimos al cine, al centro comercial, hemos ido a comer y también a cenar. En un ocasión intentamos ir a desayunar, sin embargo el día anterior nos desvelamos viendo una serie juntos por lo cual nos levantamos demasiado tarde por la mañana.

Algo que he notado con el pasar de las semanas es que nuestros besos se van haciendo cada vez más intensos y apasionados. Desde aquella noche donde tuve ese extraño, ardiente y vergonzoso sueño con Matteo donde hacíamos el amor, el suceso se ha repetido un par de veces.

Él y yo no hemos tocado ese tema para nada, así que no tengo valor suficiente para ir con él por la mañana y decirle algo como: "Hey, tu y yo nunca hemos hablado acerca de nuestra sexualidad juntos, ni siquiera nos hemos visto desnudos, pero ¿Qué crees? ¡Soñé que nos acostábamos!"

Por ahora sólo nos limitamos a darnos besos más "subidos de tono" en los pasillos de la mansión o en el depósito cuando le hago compañía en sus sesiones de composición.

- Amore, ¿en las nubes de nuevo? - la voz de Matteo me saca de mis pensamientos haciéndome regresar a la tierra y espantando de mi cabeza esas ideas acerca de mi novio y nuestros momentos de calentura.

One shots lutteoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora