CAPITULO 5

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POV DANIELA CALLE

Entré al apartamento con ganas de dormir por una semana completa, este caso sería complejo, lo sabía y en el fondo tenía la corazonada de que no saldría bien librada de el, por otro lado estaba María José, tenía la necesidad de arreglar las cosas con ella pero sé que no la tendré tan fácil, la ojiverde me había dejado muy en claro que no quería tener ningún contacto conmigo que no fuese profesional pero yo estaba decidida a aclarar las cosas aunque hayan pasado 12 años desde aquel entonces.

Escuche ruidos en la cocina, entonces me percaté de que seguía de pie en la entrada, colgué mi chaqueta en el perchero y camine en dirección al creciente sonido de ollas.

-¿Pau?- la rubia tenía un sombrero de chef y es poco decir que la cocina estaba desordenada, era un desastre- ¿Qué es todo esto? Y ¿Por qué rayos tienes el rostro lleno de harina?- cuestione y recibí una sonrisa en respuesta.

- Supe de tu caso, entonces asumí que tendrías un mal día... así que decidí salir antes del trabajo para preparar brownies- respondió mientras sacaba una bandeja del horno repleta de ellos- pero después de esto iremos a ese club al que he querido llevarte, esta vez no me puedes decir que no- me retó mientras me pasaba un plato con los deliciosos postres, no dude ni un segundo en comer uno quemándome en el intento.

- Flaca, de verdad muchas gracias, se lo que intentas hacer, pero en realidad pensaba quedarme en casa a relajarme, además, mañana tenemos que trabajar y la única dueña de su empresa aquí eres tú, a mí me patearan el culo si se me ocurre siquiera llegar tarde- solté mientras engullía un brownie.

- No acepto esa respuesta Calle, ve a ducharte, ya hurgue en tu closet y encontré el atuendo perfecto- canturreo mientras salía de la cocina rumbo a su habitación, y yo que pensaba que este día se había terminado.

Termine de acomodarme el vestido negro y apretado que había escogido Paula, ¡Dios! Ella quería que fuese de conquista y no es por ser presumida pero con este atuendo acentuaba mis curvas y los botines negros le daban el último toque para estar completamente sexy ¿Quién podría resistirse a esta preciosura?, bueno, tal vez si estoy presumiendo un poco.

-Vaya hasta que por fin terminaste de arreglarte- escuche la voz de Paula, ahí estaba ella, igualmente con un vestido negro largo y con una abertura en todo el costado de la pierna derecha, tenía tacones de aguja rojos que hacían juego con su cartera de mano- ¡Wow! creo que no me equivoque de elección- dijo mientras me analizaba, dejé mi melena risada suelta y libre, mi maquillaje era tenue pero el delineado resaltaba el color de mis ojos.

-Tú tampoco te quedas atrás Galindo- Le guiñe a lo que ella puso cara de asco.

- Créeme Calle, si fuese gay jamás estaría contigo después de saber que te acuestas con Matu Garcés, ¡iugh!- Hizo sonidos de arcadas mientras bajábamos las escaleras.

- Ya, entendí, eres una idiota, no sé porque no te cae bien- Matu era mi amante ocasional desde que estaba en la academia, a Paula nunca le ha gustado y me prohibió traerla a casa, me ha dicho que hay motivos para el desagrado que le produce pero me responde diciendo que yo misma debo averiguarlo.

- Esta bien, no me voy a dañar la noche hablando de esa zorra, más bien, agarra las llav... ¡Calle! ¿Qué diablos crees que haces?- pregunto con molestia al ver que trataba de guardar el arma en mi bolso de mano- Nada de armas, iremos a un club a bailar y divertirnos, no la vas a necesitar así que, pon esa cosa del diablo fuera de aquí- espeto.

- Pau, solo es por precaución- Me fulminó con la mirada mientras se cruzaba de brazos- Está bien, está bien- dije mientras ponía el arma en el cajón de la sala pero tome mi navaja guardándola rápidamente.

CONTRA EL TIEMPO (Caché)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora