Tan sólo soy... yo

Tan sólo soy... Mi único propósito

Supongo que esto mismo debió haber sucedido hace algunos años atrás. Siento que toda la tragedia sucedió el día de ayer. Mi padre, asesinado.. Mi madre, violada... Mi mansión.. En ruinas...... Toda mi reputación, cayendo a la basura junto con todos los bastardos y familias humilladas con la tal gravedad que no podrían volver a dar la cara ante la sociedad. Por ello siempre encerrada, por ello, siempre sola, por ello.... Formé este contrato.

Renunciar a Sebastian y a lo leal que me fue todos estos años a cambio de mi alma... Todos esos momentos en los cual él y yo pasábamos juntos las tardes... Aquellas muestras de afecto que nos envolvían en un ambiente cómodo, acogedor y muy deseable. Esos momentos jamás los olvidaré, sin embargo, aún existe esa duda: si renuncio.. ¿Estaré condenada a olvidar todo aquello? Esos recuerdos que para mi valen bastante. ¿Es eso lo que realmente quiero? ¿O no lo es? Volví la mirada nuevamente hacia William, quien continuaba esperando una respuesta por mi parte.

-Puedes tomarte el tiempo que desees.. Pero si es en menos de los próximos 5 minutos, me resultaría perfecto.- Dijo. Aún continuaban esas dudas en mi cabeza, sin embargo, siento que ya no es necesario más. Todos estos años torturándome a mi misma cuando la verdadera respuesta siempre la tuve a mi lado.......

Sebastian.

Me giré hacia él, quien tenía una expresión como nunca antes vi..... Sus ojos bien abiertos, las manos temblando al igual que las piernas y sudaba un poco. Sus ojos me miraban completamente a mi, ignorando incluso hasta su propio amo.. Sólo podría concentrarse en la única y verdadera ama que aún conservaba un alma que a todos los demonios los hacia morir de sed. ¿Acaso él estaba............Asustado? Me resultaba complicado creerlo realidad.

Yo sabía ahora muy bien que Sebastian me habría podido dar las respuestas claramente.. Nunca me hubiera negado esa orden. Ciel Phantomhive continuaría siendo su amo para toda la eternidad hasta que él mismo quiera darle fin a su vida.. Aunque sé que en los demonios es imposible hacerlo completamente; supongo que ahora no me resta otra cosa más que responder a la interroga de William. Pero... ¿Será que pueda conseguir lo que quiero sin aceptar lo que él me ofrece?

-Necesito saber.... Todo lo que sucedió en mi familia- Condicioné; éste asintió- No me engañarás y mucho menos me pondrás otras condiciones que no tengan que ver con las respuestas que me des.

-En efecto.- Me dijo.

Sentí la mano de Sebastian estirarse hacia mi. Escondí mi mano derecha atrás.

-Entonces... Anhelas mi respuesta- Susurré.

Es ahora o nunca. Ya sólo faltaba un Día. La noche había caído de repente sin darnos cuenta.. Era como si el tiempo hubiera pasado volando. Mmmm.. Esto..... ¿Sería obra de?

"Sólo te queda un día..." Sentí una serie de nubes cayendo en mi relajándome bastante al escuchar la voz de él en mi mente "aprovecha este último tiempo con tu demonio mayordomo antes de que el sol se oculte entre las sombras................. Querida"

Comprendí muy bien todas sus palabras.

-Mmmm.. ¿No puedo tener más tiempo?-pregunté.

William negó.

-Dilo.

Claro que este era el momento que tanto esperé.

-Tienes que contestarme algo primero, entonces.- Lo miré a los ojos.

Éste suspiró.

-Que sea rápido....

-¿Quién mató a mis padres?- Mi pregunta pareció cesar todos los ruidos del bosque, la madera rechinando, incluso el aire que soplaba y entraba por los agujeros de la vieja casa. Lo había interrumpido con una pregunta tan importante que a todos podría resultarle realmente estremecedor. Aparentemente, ya había dejado a todos los seres de la habitación repletamente inmóviles. Supongo que tengo una oportunidad de ser el centro de atención a partir de este momento. Es cuestión de que él quiera cooperar respondiendo a esto que me es de suma importancia.
William subió sus lentes antes de responderme:
-Tus padres fueron asesinados...- Mi corazón palpitaba rápidamente en ese momento- Por DEMONIOS.
Solté el bastón y de repente al chocar contra el suelo se rompió en pedazos. A pesar de estar hecha de la madera más fina, más hermosa y más cuidada así como conservada, por dentro se esconde un interior lleno de horror y desagradable textura..... Creo que eso lo relaciona con las pútridas criaturas que los demonios son.
Negué una y otra vez tratando de sacar todo eso que me habría de dar a perder la razón. Si eso era verdad, entonces..... Todo lo que realmente sé tiene una explicación. Aunque lo que más me mortifica es saber lamentablemente que realicé un contrato con uno de esos despreciables seres del inframundo. Me vi reflejada ante un espejo que me hacia sollozar tanto, que estaba a puto de suicidarme cuando lo rompiera y lo dejara en añicos. La parte más filosa se clavaría en cada dolor de mi corazón así simulando a la verdadera tortura que en mi vida sufrí.
Mis ojos comenzaron a inundarse. El agua quería desbordarse.. Creo que no aguantaré mucho tiempo.... Soy una Phantomhive, sin embargo, la maldición de km familia.. ¿Continuará? ¿Nunca esto se va a terminar? Sentí una mano estirándose hacia mi. Me giré rápidamente bajando la mirada presintiendo de quién me miraba se trataba. Me sentí culpable y completamente decepcionada no sólo de mi misma, si no de aquel que me había dado la palabra de vengarme contra los que habían asesinado a mi familia y a quienes humillaron aún más el apellido de mi familia.
-Joven ama........
Eso era lo único que podría decir..
Pero.. ¿Acaso puedo cambiarlo? ¿Puedo decidir entre qué tengo que hacer? ¿Puedo? ¿PUEDO HACERLO?
Sonreí.
Todo se estremeció. Sentí que él estaba a mi lado.
-Ya veo....- Levanté la mirada aún con ojos inundados de agua- Entonces los demonios son los únicos culpables.
-Así es... Esas personas juzgadas ya han sido enviadas al infierno mismo. Así es nuestro trabajo de shinigamis- Respondió.
Me entró un ataque de risa.
Solté una carcajada tan grande y larga que creo que hasta la fecha sigo sin creerme.
-¡Realmente somos unos seres despreciables! ¡Humanos y demonios!- Reía- ¡Es tan obvia la situación! ¡No tenemos compasión por nadie, ni por nuestro más querido familiar o prójimo!
Salió entonces entre las sombras.
-Mi pequeña ha aprendido al fin... Hehehehe- Undertaker rió.
Todos se mostraron perpetuos ante la situación.
-¿Esto qué significa?- Preguntó Spears muy confundido y algo molesto.
-Ehhh... La joven Phantomhive comprendió que a pesar de que los demonios mataron a sus padres en esa época llamada, "la era obscura", no puede renunciar a esto debido a que por eso sigue aquí. Desea cumplir su venganza y eso es su único propósito.
-Recuerdo esa era.... - Sebastian habló- Shinigamis y demonios arrasaban con todas las almas mientras los ángeles se hundía al abismo. Creo que fue una época excelente a pesar de estar ya en el siglo XXI.
-Nunca nos detuvimos ni por el alma más pura o más pútrida. Era nuestro apetito insaciable entonces.. Moríamos de hambre- Claude añadió.
-En ese momento no podía permitir que a ella le pasara algo, así que no tuve más remedio que alejarme después de que hiciera el contrato con el mayordomo principal del joven conde ahora demonio y de la joven lady, después de que hiciera el contrato.- Undertaker comentó
Creo que ahora estaba claro....
Una brisa nos recorrió a todos. Las ventanas se abrieron y un personaje de rojo entró volando por ahí directamente a Sebastian.
-¡SE-BAS-CHAN! ¡Vamos, un beso de lengua...!- Pero ése simplemente lo golpeó en el rostro. Ya en el suelo acomodó su guante.
-Había un mosquito.
Solté una risita cómica.
-Entonces... Esto..
El día se había acabado. Ya era atardecer. Todo estaba a punto de acabar.......
Todo se estaba desvaneciendo.
La venganza podía sentirla tan cerca...
No había marcha atrás.
La luz del sol ya estaba a punto de ocultarse.
Miré a Sebastian, quien aún tenía algo de preocupación.
-Yo sé que puedes hacerlo..- Le susurró.
Se inclinó enfrente de mi, tomó mi mano en frente de todos y me sonrió.
-Está segura...
Asentí.
Sonrió nuevamente.
Sabía lo que debía de hacer.
-Sebastian, es una orden: ¡cumple con el contrato!

-Yes....... My lady.