saliste de un libro, ¿cierto?

🌱 :: día cuatro

-¡Achu! - ya llevaba así toda la tarde, estornuda una y otra vez todo el tiempo, sabía que debía abrigarse, y no lo hizo. -Que lindo... Alguien debe estar pensando en mi- comento con una sonrisa tonta la joven.

Ray soltó un pequeño quejido al escucharla, no creía en supersticiones, pero el iba a ser el único chico en su vida, sería su primer novio, su esposo y más, o eso se imagina el azabache.

-Ya me canse de escucharte, Danielle- comento en un tono molesto, simplemente se quito la bufanda y la envolvió la mitad del rostro de la chica.

La de cabellos negros sonrio ampliamente al chico, para su desgracia no se veía por la bufanda. Era idéntica a la chica de su libro, exactamente igual, como si literalmente hubiese salido de esas páginas.

De camino a casa Ray sólo podía ver a Danielle, de perfil se veía muy hermosa y tenía un pequeño rubor en su rostro, seguramente causado por el frío, pero en verdad quería que ese rubor lo causará él.

La realidad volvió a él cuando volvió a pensar en Yuugo, si intentaba hacer algo o tener un tipo de relación que no fuese amistad con ella, lo mataría. Si no era eso, lo reprobaria por lo que quedaba de preparatoria.

[. . .]

-¿Qué vamos a comer?

-Lo que tu quieras

-¿Por qué crees que te pregunto?

-Porque no quieres comer y crees que yo si quiero- La pequeña sonrisa que mostraba la chica era única. Un día frío, estar desabrigado y enfermo ¿debería comerse algo caliente, no?

No, ambos decidieron ir a comer algo frío, para empeorar su enfermedad. Danielle ya veía a Ray cansado y cuando comenzó a decir tonterías se dio cuenta, ya se había enfermado, lo extraño es que estaba ardiendo. "Creí que le daría Gripa".

Optó por llevarlo con dificultad a su casa y dejarlo descansar en el sofá, para después acobijarlo bien y poner un trapo en su cabeza. Lo iba a dejar allí, descansando como principe, pero la tomó de la mano.

-Danielle... - se veía raro, muy lindo a su parecer, y no dejaba de pensar en lo que diría. -¿Haz tenido... Novia...?- la chica se quedó seria unos momentos y poco después soltó una carcajada

-¿Novia? Creo que te confundiste Ray

-Sabes a que me refiero...- la vio unos momentos y la chica solo mordió su labio.

Hace cinco años Danielle si había tenido novio, ella tenía 11 años y él 13, se veía un poco mal mientras más crecían, pero no les importaba. A decir verdad amaba estar con él y comer juntos, algo que no ha hecho con nadie desde que corto con aquel chico, hace dos años.

-Estas diciendo tonterías, descansa. Si tu mamá se entera que te enfermaste por mí culpa me regañara - comentó con una pequeña sonrisa algo tonta, desviando la mirada.

Algún día le diría, le contaría todo, pero ese no era el momento adecuado, mucho menos por qué apenas llevaban una semana de conocerse. El amor lleva tiempo, todo lo bueno lo lleva ¿no?