❀ dos

8K 777 220
                                    

Creo que ya perdí el toque para las historias 😔😔
Terminaré esta u la otra.
Y me iré a Hiatus.
Las jamón.

____________'_'


La noche anterior asistió a una fiesta que lo dejó realmente agotado. Fue aún sabiendo que al día siguiente tenía que ir muy temprano al trabajo, llueva o truene.

La cabeza le va a explotar si oye un claxon más de los automóviles, es un universitario de recursos medios, así que no tiene automóvil para moverse a donde quisiera, por eso, se ve obligado a tomar taxis, autobuses o andar a pie. Hoy optó por la última. Caminar le relaja, pero hoy desgraciadamente no lo está haciendo.

Falta tan solo una semana para navidad y la gente está como loca haciendo sus compras justo hoy, para su mala suerte. Le duelen los hombros y brazos por tanta gente con la que ha chocado, sus párpados pesan y el estomago ruge. Ahora se daba cuenta de que fue mala idea no desayunar antes de salir de su apartamento.

Da un suspiro cansino, sacando las llaves del consultorio dental. Son las 10:40 de la mañana y tiene unos minutos de atraso, incluso una anciana le esperaba a un lado de la puerta. sonríe amable y le hace pasar.

— El doctor debe de llegar en un momento. — informa, poniéndose la bata, que resulta ser su uniforme.

— Gracias, no te preocupes. — contesta la señora.

Enciende la pantalla plana colgada en una de las paredes, quedándose un canal de música de moda en un volumen audible. Seung, el odontólogo, llega un rato después, acompañado de su asistente -esposa-, y le dicen a la anciana que puede entrar a su consulta, apenas escucha que la puerta se cierra, cruza los brazos sobre su mesa y se recuesta para poder dormir un poco.

Quince minutos después, la campanilla suena, indicando que alguien había entrado al lugar. Siente unos cuantos golpecillos en la mejilla, alarmado, despierta bruscamente, asustando a la persona que le hablaba. Restriega sus ojos y así puede ver quien es.

— Hey. —  saluda. — Hoy no tienes consulta, ¿o si?. — comienza a revisar las libretas, donde todo estaba apuntado.

— Hola, y no. Vine a traerte esto, es para mi cumpleaños. Mamá dijo que podía invitar a unos cuantos amigos. No será la gran cosa, comeremos pizza y frituras. — dice emocionado, pasándole un pedazo de papel.

Era una invitación hecha a mano, en papel lila con brillantina, y por lo que nota, está escrita por Jungkook. En ella se leía:

'Te invito a mi fiesta, mañana. ¡ya sabes dónde vivo! no faltes, te espero.'

En letras cursivas, o eso es lo que JiMin piensa.

Alza su vista y ve a Jungkook, parado con sus mejillas rojas, el cabello despeinado y en la cabeza, una diadema con orejas de conejo en color azul celeste, luce bastante adorable.

El mayor ríe dulcemente cuando nota que el menor se frota los ojos, esperando una respuesta.

— Claro que iré. ¿A qué hora? Aquí no dice.

— Oh, que tonto. — ríe, apenado. — Cerca de las ocho. Ten, estas son para Taehyung y tu amigo Yoonie. No falten.

— Ahí estaremos, kook.

— ¡Adiós, nos vemos mañana!. — medio grita, saliendo del local. Dejando a JiMin con una gran sonrisa en el rostro.

Claro que asistiría, con o sin sus amigos iría. Tal vez a Taehyung y Yoongi les pareciera aburrido ir a un cumpleaños de un adolescente.

Observa detenidamente las tarjetas, fijándose que eran diferentes, las de Tae y Yoon se ven hechas por otra persona, eran letras más ordenadas y elegantes que las de JiMin.

Saca a relucir su eyesmile, y su corazón bombea fuertemente.

Jungkook había hecho una invitación especial para él.











_❀










Con una gorra hacia atrás negra, una camisa cuadriculada roja, sus botas y pantalones igualmente negros, sale del baño a su habitación, donde Tae le esperaba ya listo también.

— No puedo creer que me hagas ir a una fiesta infantil. — murmura el peligris, en tono de reproche.

— No es una fiesta infantil. Creo que está cumpliendo quince o dieciséis.

— ¡Eso! ¡es prácticamente un niño!. — dice, alzando la voz. — JiMin, amigo, no puede gustarte un niño.

— No me gusta. — cerró la puerta del apartamento. — Sólo me cae bien, y... me parece tierno.

— O sea, te gusta. Acéptalo, te estás cagando por él.

JiMin rueda los ojos. Taehyung era imposible.

— Sí, sí. Me estoy cagando por él, como tú dices.

Consiguen un taxi apenas salen de la universidad. Yoongi los esperaría en la puerta de la casa del menor.

Cuando llegan, como habían acordado, Yoongi esperaba y fumaba un cigarrillo apoyado en la puerta de Jungkook. Taehyung sonríe, acercándose a su novio para saludarlo como se debe.

— Son repugnantes. — comenta JiMin, mientras sus amigos se besan como si tuvieran años sin verse.

Toca el timbre varias veces y un chico alto les abre. JiMin lo reconoció como el gemelo-vecino-amigo de Jungkook.

— ¿Qué hacen aquí?. — pregunta, extrañado

— ¡Hey, Tae!. —  saluda de manera alegre.

— Yo- Jungkook nos invitó. — JiMin tartamudea.

Yugyeom era tal vez unos dos centímetros más alto que él, pero con su mirada dura y su sonrisa burlona, intimidaba.

— ¡Yugy, deja a los chicos en paz! son amigos del pequeño kookie. — oyeron la voz de Sung dentro de la casa.

El gemelo se hace a un lado, dejando a los tres muchachos entrar. Adentro hay unos cuantos pocos chicos, los padres de Jungkook, sus hermanos y el gordo perro de los gemelos.

Divisa a Jungkook sentado en las escaleras, hablando con otro chico que lucía de su edad, tiene el cabello castaño en las raíces y arriba se iba haciendo más claro hasta llegar a ser rubio.

— Feliz cumpleaños, KooKoo. — felicita JiMin, una vez frente al pequeño.

— ¡Oh, viniste!. — Jungkook se para de un bote, abrazando a JiMin. — Yugyeom dijo que no vendrías, y yo le dije que sí, porque eres bueno.

— Sí, aquí estoy. — le devuelve cortamente el abrazo.

Los novios lo felicitaron igualmente, y Jungkook les agradece siempre con una sonrisa.

— Buenas noches. — JiMin oye que le hablaban por detrás. Es una voz madura y fuerte. — Soy el padre de Jungkook ¿Y ustedes?.

— Y-o- yo soy JiMin, señor. — se presenta, nerviosamente.

— Mucho gusto, JiMin y...

— Yoongi, y él es Taehyung. — contesta el pálido de manera rápida. — Vivo por aquí señor, conozco a Jungkook de hace algún tiempo.

— ¿No son un poco mayores para ser amigos de mi pequeño?. — la madre de Jungkook se acerca.

— ¡Mamá, Papá! ¡dejen a mis amigos!. — Jungkook pateó el suelo, haciendo un berrinche.

— Tranquilo, kookie. Muchachos, acompáñenme. — el señor Jeon hace una seña para que los tres le siguieran y ellos obedecieron.















______________________'_'







Ta- Daaaaaa...
Bueno, espero la amén como yo lo hago.

✧ミ🐍 SLYTHERIN_BOY

Quinze ans ⊰⁠⊹ฺ JikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora